Este mes de julio se producían dos hechos en teoría inconexos. Por un lado el veterano activista Rogelio Calavia era propuesto para sanción (600 euros) por la Delegación del Gobierno en Aragón. El motivo participar en la paralización del desahucio de Ruth, José y sus dos niñas en noviembre de 2020, objetivo que se logró. La Delegación era entonces dirigida por la actual Ministra de Educación Pilar Alegría.
