En una zona donde existe una acomplejada catalonofobia, ser aragonés y escribir en catalán es un delito execrable, una anomalía que invalida cualquier obra. Y no estoy hablando de ese franquismo de ricio incapaz de distinguir un golpe de estado de una grapadora, sino del extraño sentir popular en el que la diversidad debe ser neutralizada y aniquilada, como si supusiese una amenaza.
Tras los pasos de Lucien Briet en el Mascún
El profesor y fotógrafo Enrique Carbó desarrolló un taller de refotografía en el Barranco del Mascún vindicando con ese acto la importancia de la obra de Lucien Briet, el fotógrafo y escritor francés que descubrió la belleza de la Sierra de Guara y del Pirineo aragonés a principios del siglo XX. Obviamente la sierra ya existía antes, pero fue su documentación gráfica y su testimonio lo que le otorgó categoría de paisaje, máxime en un momento histórico en el que la población de esos lugares mantenía una relación con la naturaleza abismalmente diferente a la actual. El taller Tras los …