El texto se dirige al Gobierno de Aragón de Jorge Azcón (PP-Vox) con el fin de que considere las propuestas y peticiones formuladas. Entre las organizaciones se encuentran redes de productores como el Mercado Agroecológico y Local norte Teruel; entidades vinculadas con la agroecología como CERAI - Centro de Estudios Rurales y Agricultura Internacional, Mensa Cívica o Justicia Alimentaria; colectivos ambientalistas como la Alianza por la Emergencia Climática Aragón o la Fundación Nueva Cultura del Agua; cooperativas de personas consumidoras como A Vecinal; y proyectos de comunicación como Mallata y Biela y Tierra. También han firmado entidades vinculadas con la salud, lo social y la educación como ADSPA - Asociación en Defensa de la Sanidad Pública, la FABZ - Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza, el Comité de Solidaridad Internacionalista o el nodo de Aragón de Teachers for Future Spain. Todos ellos coordinados desde la Plataforma Aragón Hacia la Soberanía Alimentaria (AHSA).
Ante las movilizaciones que se están produciendo en el sector agrario en muchos países, por la falta de rentabilidad como denominador común, denuncian que esta situación de "colapso del modelo agropecuario" es fruto de las políticas neoliberales, de libre comercio y globalización económica, aplicadas durante las últimas décadas en todo el mundo.
"Debido al estancamiento de los precios en origen, se ha implantado un modelo agrario que necesita incrementar superficie y rendimientos a toda costa. El agronegocio ha generado una dependencia del uso constante de fitosanitarios y abonos minerales que lastra al sector primario por los crecientes costes de los mismos, fuertemente vinculados al declive de la disponibilidad energética. Estas políticas son también las responsables de que se hayan dejado de producir alimentos accesibles y disponibles para las poblaciones locales, convirtiéndose en meras mercancías. Esto provoca la continua desaparición de pequeñas explotaciones familiares en todo el mundo y la destrucción de los recursos naturales, que sostienen la vida tanto aquí como en otras partes del planeta", apuntan en el manifiesto.
Estrategias para la "desintensificación"
Las organizaciones firmantes consideran que se deben diseñar estrategias para la "desintensificación" de la agricultura y de la ganadería en Aragón. Ven necesario incentivar la transición a un modelo a pequeña y mediana escala que sea "sostenible, diversificado, agroecológico" y destinado "prioritariamente" a "la comercialización y consumo local", con "precios justos" para las personas productoras y consumidoras. Este modelo "debe reducir la contaminación y los plaguicidas, ayudar a mitigar la crisis climática y apoyar a los pequeños y pequeñas productoras y disminuir la burocracia, frenando así la desaparición del sector agrario familiar y del mundo rural", añaden.
En esta línea, se dirigen al Gobierno de Aragón para plantearle un conjunto de propuestas encaminadas a transformar el actual sistema alimentario recogidas en el manifiesto. Entre ellas destacan las relacionadas con la aplicación de Ley de la cadena alimentaria para reducir el desequilibrio en las relaciones comerciales entre los diferentes operadores de la cadena de valor, acciones que eviten las importaciones de productos que no cumplen los estándares legislativos exigidos por la normativa europea vigente, una moratoria a la ganadería industrial y un mayor fomento de una agricultura y ganadería agroecológica, redistribuyendo de forma eficiente las ayudas de la PAC para apoyar esta transición.
Además, en una situación de cambio climático, demandan el fomento de modelos de agricultura y ganadería con "baja huella hídrica", como el secano tradicional o la ganadería extensiva, "frenando la expansión irracional del regadío en zonas áridas destinados a cultivos altamente exigentes". Al mismo tiempo abogan por una compra pública estratégica (escuelas, hospitales…) que contribuya "al desarrollo del territorio y a su resiliencia global", introduciendo criterios geográficos en la contratación de alimentos.