El Ayuntamiento de Uesca, al mando del alcalde Luis Felipe (PSOE), con el apoyo de PP, Cs y Vox, ha anunciado que recurrirá la sentencia dictada por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 1 de Uesca por la que le obliga a cumplir la Ley de Memoria Democrática de Aragón y retirar los vestigios franquistas.
En concreto, a retirar la placa franquista del patio municipal, así como a eliminar del callejero los nombres de los alcaldes del régimen dictatorial Mateo Estaún Llanas, José María Lacasa y Mariano Ponz; así como eliminar del nomenclátor la referencia a Federico Mayo.
El PSOE, con el apoyo de las tres derechas y ultraderechas, PP, Ciudadanos y VOX, ha tomado esta decisión porque se niega a cumplir la orden de eliminar del callejero de la ciudad el nombre de las vías. Y presentará recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA).
"Tras cinco meses de obras y una inversión de más 110.000 euros, hemos solucionado los problemas de humedad en el patio del ayuntamiento, pero no los de franquismo", critica Con Huesca en una nota de prensa, en la que deja clara su oposición al recurso de la sentencia que presentará el Consistorio.
"Como Ayuntamiento debemos de ser exquisitos en la interpretación, aplicación y ejecución de la normativa sobre la Memoria Democrática de Aragón. Por dignidad con las víctimas, desde Con Huesca Podemos Equo exigimos el cumplimiento íntegro de la sentencia", señala Óscar Sipán, portavoz del grupo municipal.
"No entendemos la actitud del alcalde socialista Luis Felipe que, por un lado malgasta dinero público en empeños personales, protegiendo vestigios franquistas que prometió retirar en el anterior mandato, y por otro incumple las leyes de Memoria Histórica y Memoria Democrática, aprobadas respectivamente por el Parlamento en 2007, durante el gobierno socialista de José Luis Zapatero, y las Cortes de Aragón en 2018", añade el portavoz de Con Huesca.
"Recurrir la parte de la sentencia que afecta a las calles de los alcaldes es estar en contra de la finalidad y el espíritu de la Memoria Democrática", concluye Sipán.
Por su parte, IU considera que a pesar de que el Ayuntamiento “está en su derecho de presentar recurso tras recurso y de seguir gastando tiempo y dinero en no cumplir una Ley aprobada por su propia organización política”, decisiones como estas “no favorecen a la ciudad de Huesca, por sus consecuencias y repercusiones sobre la misma”.
“Este Ayuntamiento no deja de sorprendernos día tras día y nos gustaría preguntar al alcalde de nuestra ciudad si está a favor o en contra de la ley de Memoria Histórica al asumir directamente las tesis de organizaciones políticas de ultraderecha”, cuestiona Pilar Callén, Coordinadora de IU Huesca.