Grupos ecologistas denuncian que "El bosque de los zaragozanos" empieza sin participación

Las máquinas ya están arrasando todo el terreno donde el proyecto tendrá lugar, dejándolo sin vegetación y sin su fauna asociada, sobre terrenos de cultivo y vegetación adaptada al terreno

Aspecto de la parcela durante la intervención.

ANSAR, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción y Animalética denuncian que, si bien se les ha convocado a varias reuniones de presentación de "El bosque de los zaragozanos", se ha iniciado sin participación en el diseño del proyecto y sin la opción de realizar aportaciones. Este plan, que se anuncia como colaborativo, tiene el objetivo de reducir la huella de carbono de Zaragoza capital.

Las asociaciones recuerdan que no es la primera vez que esto ocurre. El pasado 7 de octubre en una reunión a la que fueron convocadas se les invitaba a ser informados sobre las actuaciones que se iban a desarrollar en dicho proyecto. En esta reunión la única información aportada fue que se iba a plantar un llamado “bosque de almendros”, que ocuparía una hectárea en la margen derecha del Canal Imperial a la altura del punto limpio situado en la calle San Juan Bautista de la Salle y "sobre el que no había nada que opinar y aportar pues ya estaba adjudicado y las máquinas en funcionamiento", como las organizaciones ecologistas han podido comprobar.

Por otro lado, se informó que la actuación en esta zona del Canal Imperial abarcará hasta 42 hectáreas y que se contaba con una propuesta realizada por un equipo externo resultado de una licitación pública pero sobre la que "no se podía informar en ese momento pues la estaban estudiando".

En estos días, las máquinas ya están arrasando todo el terreno dejándolo sin vegetación y sin su fauna asociada. La actuación, considerada por las organizaciones ecologistas como "muy agresiva e indiscriminada", se realiza sobre terrenos ocupados en tiempos por cultivos y sobre los que ha crecido una vegetación adaptada al terreno que cubre totalmente el suelo.

Es una zona de sisallar, acompañado de otras especies de flora que albergan un gran número de invertebrados y también vertebrados. Hay que recordar que el sisallo, por ejemplo, es una planta especialmente adaptada al clima y suelo del Valle del Ebro, que cumple muy bien sus funciones ecológicas de protección de suelo y posee innumerables valores tanto naturales como culturales.

En este sentido los ecologistas ignoran si se ha realizado un estudio previo que permitiera conocer la comunidad de fauna y flora presente, evaluar la riqueza biológica existente así como la fijación de carbono que ya estaba proporcionando este suelo provisto de una cubierta vegetal y valorar, en consecuencia, el tipo de restauración a realizar. "En la reunión, sin aportar datos, solo se reiteró por los técnicos municipales que eran espacios degradados de escombrera sin ningún valor", denuncian, afirmación que no es compartida por los grupos ecologistas.

En este sentido, han solicitado al Ayuntamiento que, en base al derecho a la información en materia de medio ambiente, se pueda tener conocimiento de las propuestas planteadas para las 42 hectáreas de esta zona sobre la que inicialmente se va a actuar y que sobre dicho documento se puedan realizar aportaciones. En opinión de las asociaciones ecologistas es importante aprovechar esta oportunidad para conseguir una ciudad más sostenible, donde se mejore la protección de los espacios naturales ya existentes y se restauren los que se encuentren en peor estado con sensibilidad, con criterios científicos que favorezcan la naturalidad y biodiversidad, teniendo en cuenta la aridez del territorio y las perspectivas de cambio climático.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies