Convocadas por la Asociación Vecinal de la Madalena Calle y Libertad, la Asamblea 15-M de la Madalena y Stop Desahucios, las vecinas y vecinos del barrio de la Madalena se han dado cita este mediodía en un pasacalles contra la especulación.
Esta iniciativa pretende visibilizar aquellas viviendas, edificios y espacios muertos que podemos encontrar en el Casco Histórico de Zaragoza, mientras el precio de las viviendas en la zona hay ido creciendo en la última década de manera exponencial, originando en las ciudadanas y ciudadanos grandes dificultades económicas y riesgo de desahucio.
Un cortejo con el alcalde de la Madalena y el obispo al frente ha recorrido las calles del barrio mostrando algunos de los edificios y solares abandonados que podrían tener un uso social. En sus paredes se han colgado unos textos en los que se explica la situación en que se encuentran y sus posibles usos. Así, la Iglesia de la Magdalena sigue cerrada pese a que la obra lleva tiempo concluida. Un edificio que bien pudiera ser utilizado como centro cultural. Se estima que hay hasta 50 solares, muchos de los cuales aún sin utilizar, que podrían servir como huertos vecinales. Hay edificios reformados, listos para vivir, que sin embargo continúan vacíos. Otros, en mal estado, algunos incluso catalogados de interés arquitectónico, llevan años abandonados, cuando podrían servir de viviendas de alquiler social. También se da la situación de destrozos en el patrimonio, como es el caso del Caserón Labalsa, del siglo XVII, que lejos de ser conservado íntegramente como debiera, permanece desde hace años cubierto por andamios y sin un uso claro de cara al futuro.
Frente a este edificio,el pasacalles ha concluido con un vermú vecinal.
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