La Confederación General del Trabajo (CGT) ha emitido un comunicado en el que condena “el progresivo racismo que el Estado de Israel ejerce de forma creciente y continuada contra la población palestina”.
El sindicato considera que detrás de la aprobación, el pasado 19 de julio, de una nueva ley que declara al país como “un Estado para la nación judía”, el Estado de Israel “impone como capital única y entera la ciudad de Jerusalén, reconoce el derecho de autodeterminación solo para los judíos e impone el hebreo como única lengua oficial, existe una clara intención de afianzar su superioridad étnica”.
La organización anarquista lleva décadas denunciando que Israel “no desiste de su intención de construir y hacer cada día más fuerte un Estado sionista asentado en el exterminio del pueblo nativo que habitaba esta zona”. Asimismo, según CGT, el Estado de Israel “lleva años ocupando y expropiando” las tierras de la población palestina “a través de la represión y el asesinato de miles de civiles que resisten a las fuerzas de ocupación israelíes con piedras y palos”.
Es por todo ello que la confederación ha querido denunciar “la situación que padece el Pueblo Palestino” y subraya que “todas las formas de organización social y política que no se fundamenten en la igualdad de derechos, el respeto y la libertad no podrán denominarse ‘legítimas’”.
Al mismo tiempo, la organización anarcosindicalista ha criticado “la pasividad de la Comunidad Internacional, que asiste a la masacre del Pueblo Palestino casi sin inmutarse y consintiendo que los diferentes gobiernos del Estado de Israel y las empresas que lo sustentan económicamente, continúen lucrándose a costa del dolor y la muerte de seres humanos inocentes”.