Cerca de medio millar de personas se han concentrado durante la tarde del lunes 2 de junio para exigir que sea la ciudadanía quien decida si la Monarquía debe continuar en la persona del heredero o desaparecer definitivamente. Durante el acto se han proferido gritos contra la Monarquía como institución como contra las personas pertencientes a la misma e implicadas por acción u omisión en distintas causas judiciales.
La convocatoría, que se ha extendido por las redes sociales, ha transcurrido en un ambiente de cambio ilusionante. "Estamos ante un momento histórico que hay que saber interpretar", afirmaba una de las asistentes. Por su parte, otra de las asistentes, evidenciaba "la ausencia de cierto partido -refiriéndose al PSOE- que en su día se reclamaba republicano y que en este momento ha demostrado estar sumido en una grave crisis de identidad, por no decir que es parte de la metástasis del sistema". Finalmente, una persona de avanzada edad, se mostraba contenta de "poder volver a ver los colores por los que había luchado sin tener que esconderse".