El 15 de noviembre estalló la huelga general como respuesta a la represión sindical ejercida por las autoridades y la Federación Patronal. Durante poco más de tres semanas el pulso se recrudeció entre autoridades y sindicatos

El 15 de noviembre estalló la huelga general como respuesta a la represión sindical ejercida por las autoridades y la Federación Patronal. Durante poco más de tres semanas el pulso se recrudeció entre autoridades y sindicatos
Durante el fallido intento de insurrección del Cuartel del Carmen de enero un redactor del Heraldo de Aragón dio el chivatazo a las autoridades. Los libertarios no olvidaron y once meses después se tomaron la venganza en medio de una violenta huelga general que ya duraba tres semanas.
Las jornadas anteriores al 30 de octubre de 1920 habían llevado de nuevo la violencia a las calles de Zaragoza; a la represión y censura gubernamental se respondió con agresiones y bombas hacia la patronal.
La llegada del otoño no trajo la paz a las calles de Zaragoza. La pequeña tregua tras el atentado contra los esquiroles de la huelga de los gasistas de agosto y la consiguiente crisis en el Ayuntamiento no tardó mucho en saltar por los aires. Primero fueron las protestas contra la subida del pan protagonizada por las mujeres, seguidamente las huelgas contestadas con la represión gubernamental y los atentados y sabotajes que a la vez daban respuesta a dicha represión. La conflictividad no dejaba de aumentar en los meses que llevábamos de 1920, huelgas, muertos, detenidos… La lista aún iba a aumentar considerablemente.
El conflictivo verano de 1920 abocaba a una situación traumática inevitable. En agosto al asesinato en Utebo del presidente de la sociedad de obreros campesinos le siguió en modo de respuesta el atentado mortal contra tres esquiroles de la huelga de gasistas en Zaragoza.
La finalización, y fracaso, de la huelga de camareros parecía traer la tranquilidad a las calles de Zaragoza pero nada más lejos de la realidad. Las huelgas, los atentados y los asesinatos fueron habituales durante los meses del verano de 1920.
En plena huelga de camareros y camareras, que se alargaba desde diciembre de 1919, un supuesto atentado con dos víctimas mortales aumentó aún más la conflictividad que había alcanzado el movimiento huelguista tras varios ataques con bomba en Zaragoza
A finales de diciembre de 1919 comenzaba una huelga de las y los camareros que se iba a enquistar durante meses y que iba a alcanzar altos grados de conflictividad. Desde octubre reivindicaban la jornada de 8 horas, un salario de 60 pesetas mensuales y el 25% de las ventas quedando abolidas las propinas.
1920 fue uno de los años más importantes, sino el más, de la actividad anarcosindicalista y libertaria en la historia de Zaragoza: intentos de insurrección, atentados, terrorismo de estado, huelgas generales, huelgas sectoriales, muertos en ambos bandos… La presencia de organizaciones obreras era muy importante con la Federación Local de Sociedades Obreras y la CNT a las que había que sumarles los grupos de afinidad, como los Indomables.