La nueva línea de alta tensión de Forestalia atravesaría Aragón de oeste a este

Su solicitud, en trámite administrativo, para la construcción de parques de 49,5 MW cada uno y sus infraestructuras de evacuación, dos líneas de alta tensión de 400 kV (LAATs) con apoyos de hasta 80 metros de altura, atravesarían las comarcas de Plana de Uesca, Monegros, Somontano de Balbastro, Cinca Meya, La Llitera y Ribagorza.

Estas líneas se presentan como infraestructuras de evacuación de energía de las centrales eólicas, en trámite de autorización administrativa, OMEGA, KAPPA, ÓRBITA, ÓMICRON, LAMBDA e IOTA, de 49,5 MW cada una, y dos líneas con una longitud de más de 150 km, promovidas por la empresa privada, Forestalia “vulnerando la legislación del sector eléctrico, que dicta que líneas de más de 380 kV deben ser consideradas como líneas de transporte, de construcción exclusiva por el operador del sistema eléctrico español, Red Eléctrica de España”, explican desde Ecologistas en Acción Huesca.

La entidad ecologista denuncia que “la pretensión de crear, para uso propio de una empresa, redes de transporte eléctrico particulares supondría alejarse de una planificación energética sostenible y abre la posibilidad de que otros promotores quieran construir también sus propias líneas de evacuación/transporte generando múltiples trazados que conllevarían impactos inasumibles”.

Por otro lado, señalan que las líneas de muy alta tensión proyectadas “tienen un dimensionado totalmente desproporcionado en relación a la energía producida por los seis parques eólicos proyectados, pues estos parques no usarían ni el 10% de la capacidad de la línea proyectada motivo por el que Forestalia ya está presentado grandes proyectos de centrales eólicas y fotovoltaicas, parques eólicos Próxima Centaury, Stigma , centrales fotovoltaicas Heze y Ersa, todos ellos cercanos a los 50 MW, que se deben desarrollar en el mismo territorio por donde cruzan las líneas de AT, con la finalidad de rentabilizar cuantiosamente la construcción de semejantes líneas de alta tensión”.

Las enormes dimensiones de estas infraestructuras provocan “importantísimos impactos ambientales y sociales en una amplia franja de territorio del norte de Aragón, atravesándolo de oeste a este, que se suman a otros muchos proyectos cercanos, en desarrollo o tramitación, por lo que es fácil prever que se sumarán los impactos sociales y ambientales de todos ellos. Por estos motivos, el Gobierno de Aragón debería haber realizado una evaluación ambiental estratégica de todo el conjunto de infraestructuras energéticas que se proyectan. De acuerdo a la legislación aragonesa la evaluación ambiental estratégica debería realizar un diagnóstico de los efectos ambientales previsibles del conjunto de proyectos, justificar su sostenibilidad social y los efectos sobre otros planes sectoriales y territoriales que concurran en el mismo territorio”.

“Para hacernos una idea de la magnitud del problema hay que decir que, solo desde septiembre de 2021, y cada pocos días se presentan nuevos, Forestalia ha presentado en Aragón, para su aprobación, 65 proyectos de centrales eólicas que suman 3.030 MW y 13 central es fotovoltaicas con una potencia total de 593 MW”, explican desde Ecologistas en Acción.

También recuerdan que “las Líneas de Alta Tensión proyectadas y sus centrales eólicas provocarían un importante impacto visual y paisajístico, así como sobre la calidad de vida, y supondría una pérdida significativa del valor de las propiedades afectadas, daños a los sectores primario y turístico, muy graves en un contexto de emergencia climática y crisis energética, encarecimiento de terrenos agrícolas, efecto disuasorio para nuevos pobladores y empresas, una clara barrera, en razón de su trazado, para el desarrollo futuro de los núcleos urbanos afectados, y daños al patrimonio histórico-artístico”.

En definitiva, a juicio de la organización de defensa del medio ambiente “su construcción, resultaría injusta en términos sociales y ambientales: deja sus impactos negativos en el territorio y se lleva sus presuntos beneficios a una de las zonas urbanas e industriales más desarrolladas de Europa mediante su conexión con la LAAT Sentmenat-Sallente”.

“Los impactos ambientales de estas líneas de AT y de los cinco parques eólicos proyectados son muy importantes. Los parques eólicos se pretenden instalar en las cercanías del embalse de La Sotonera, zona de especial protección para las aves, en el único pasillo que quedaba libre de parques eólicos. En estos emplazamientos las afecciones serían muy importantes, sobre todo para las aves esteparias, sisón, y ganga y ortega pues los polígonos de los parques se emplazan en zonas críticas para estas especies, pero también para otras especies amenazadas como el milano real, el alimoche, el cernícalo primilla o las grullas y para muchas otras especies migradoras, que usan La Sotonera como lugar de reposo durante los pasos migratorios”, denuncian.

En el mismo sentido, recuerdan que ”las líneas de AT, también suponen importantes afecciones para la avifauna pues afectan a áreas críticas de aves esteparias, incluida la única zona de presencia de avutarda en comarcas del norte. También atravesaría zonas críticas de cernícalo primilla y de quebrantahuesos y a zonas de protección de águila perdicera y nidificaciones de milano real y alimoche especies que se encuentran amenazadas en Aragón”, así como que “el trazado de esta línea de 400 KV atraviesa numerosos espacios de la Red Natura, afectando de forma muy importante, al LIC de los Yesos de Balbastro, que es atravesado en las inmediaciones de Almunia de San Juan. También afecta al LIC de la Sierra del Mongay”.

Por todo ello, Ecologistas en Acción ha presentado alegaciones “solicitando que no se autorice dicho proyecto y se realice una declaración de impacto ambiental negativa”.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de nuestra política de cookies, pincha el enlace para más información.

ACEPTAR
Aviso de cookies