Las delegaciones de Rusia y Ucrania han mantenido este jueves el segundo encuentro de la ronda de conversaciones para intentar alcanzar un alto el fuego, que de momento no llega. Lo que sí ha trascendido es que Moscú y Kiev "han llegado a un entendimiento sobre la creación conjunta de corredores humanitarios" para la evacuación de civiles y la entrega de alimentos y medicinas, ha afirmado el asesor presidencial ucraniano Myjailo Podolyak. "Se abrirán vías para facilitar una circulación segura, libre de ataques, de ayuda humanitaria y de las víctimas del conflicto" pero "no cesarán los ataques en todas partes", sino "solo en aquellos lugares donde se ubiquen los corredores humanitarios", ha aclarado Podolyak.
Por su parte, el jefe de la delegación rusa, el asistente de la Presidencia Vladímir Medinski, ha calificado de "progreso significativo" los acuerdos alcanzados durante la jornada. "La cuestión principal que se ha resuelto es la cuestión de salvar a las personas civiles, que se encontraban en la zona de los enfrentamientos", ha señalado. Según Medinski, durante las conversaciones se han discutido tres bloques: el militar, el humanitario y una futura solución política del conflicto. "Las posiciones son absolutamente claras, están escritas punto por punto", ha indicado, antes de resaltar que las partes han logrado "encontrar un entendimiento mutuo para algunas de ellas".
La reunión, que iba a tener lugar este miércoles pero se aplazó 24 horas, se ha celebrado en Belovezhskaya Pushcha, en la región bielorrusa de Brest, cerca de la frontera con Polonia. Moscú y Kiev se han emplazado a seguir con el diálogo en un tercer encuentro que, previsiblemente, será este fin de semana o el lunes en algún lugar de Bielorrusia.
Después de la primera ronda de negociaciones que tuvo lugar el lunes, en Gomel -frontera ucraniano-bielorrusa-, sin resultados tangibles, el Kremlin aseguró que la delegación rusa está preparada para intentar lograr un acuerdo para poner fin a la invasión. Desde el gobierno de Ucrania apuntaban que "estamos preparados para negociaciones, estamos abiertos para la diplomacia, pero de ninguna manera estamos preparados para aceptar los ultimátum rusos". Fuentes de la delegación ucraniana detallaron las propuestas realizadas en el primer encuentro. Entre otras cuestiones, Moscú habría exigido a Kiev reconocer la independencia de Donetsk y Lugansk, para "proteger a la población del Donbass", y retirar la petición de que la península de Crimea sea devuelta a Ucrania. Las autoridades ucranianas solicitaron el alto el fuego inmediato y la retirada de las tropas rusas.
Tropas rusas toman Jersón, la puerta a Odessa
Este segundo encuentro de negociaciones llega cuando se cumple una semana de combates, que no cesan. Este jueves, las tropas rusas han tomado el control de la estación ferroviaria, del puerto y de la ciudad de Jersón (290.000 habitantes), al sur de Ucrania, una vía desde donde pueden preparar el asalto de Odessa -la última salida al mar Negro que le queda a la flota ucraniana-. También controlan, tras intensificar los ataques en las últimas horas, la ciudad de Járkov -al noroeste, cerca de la frontera con Rusia, de 1,4 millones de habitantes-. En Kiev, tropas rusas continúan con su avance. El martes, poco después de que Moscú llamara a la población de la capital ucraniana a abandonar sus hogares, un ataque aéreo destruyó la torre de telecomunicaciones, de 385 metros de altura, causando cinco muertes y dejando sin televisión a toda la ciudad.
El Ministerio de Defensa ruso informó el miércoles que habían tomado el control de Tokmak, localidad del sur de Ucrania. El portavoz de la milicia de la República Popular de Donetsk, Eduard Basurin, ha asegurado, además, que han bloqueado el puerto de Mariupol, en el mar de Azov, una ciudad donde tiene su base el Batallón Azov, integrada en la Guardia Nacional de Ucrania -dependiente del Ministerio del Interior- es una de las quince unidades paramilitares neonazis y de extrema derecha que operan con total impunidad desde hace ocho años, tras las revueltas del Euromaidan. Basurin, ha acusado, en una entrevista a la televisión Rossiya 24, a los batallones nazis Azov y Pravy Sektor de impedir la salida a civiles de Mariupol por el corredor humanitario habilitado. "La gente se han convertidos en rehenes. Están como en un campo de concentración, no se puede decir con otras palabras", ha añadido. En esta zona se registran fuertes combates. El objetivo de Moscú es crear un corredor amplio que conecte Crimea con los óblasts de Donetsk y Lugansk.
En el Donbass, donde estalló la guerra en 2014 y no han cesado los bombardeos de Ucrania desde entonces, las fuerzas ucranianas dispararon el miércoles contra el territorio de Donetsk en 41 ocasiones, según informan los representantes de esta República Popular. La milicia de la República Popular de Lugansk informaba de nueve ataques lanzados este miércoles por el Ejército de Ucrania contra siete localidades. Ataques que han continuado en estos días.
El Ministerio ucraniano de Defensa, por su parte, ha indicado que desde la noche del miércoles se han recrudecido los ataques aéreos procedentes de Bielorrusia. También afirma que "las fuerzas de ocupación" han "fracasado" en casi todas las zonas en las que avanzaban y que el "principal objetivo" ahora mismo es "resistir".
Putin afirma que la "operación especial" en Ucrania "va según lo planeado"
Los mensajes de una y otra parte se suceden. Este jueves ha vuelto a hacer una declaración televisada el mandatario ruso Vladímir Putin, previa a la reunión del Consejo de Seguridad de Rusia. "La operación especial rusa en Ucrania va según lo planeado, en estricta conformidad con el cronograma, y todas las tareas establecidas se están cumpliendo con éxito", ha afirmado con rotundidad. Putin ha acusado a "los nacionalistas ucranianos y mercenarios extranjeros" de "esconderse detrás de civiles como escudo humano". También ha asegurado que sus Fuerzas Armadas de Rusia "proporcionaron corredores humanitarios para los civiles en todas las zonas de combate en Ucrania", pero "los nacionalistas ucranianos no les permiten salir, colocando además armamento pesado en zonas residenciales". Para terminar, ha asegurado que "los rusos y los ucranianos son un solo pueblo, nunca dejaré de creer en ello".
También ha movido ficha Occidente. La Asamblea General de la ONU aprobó este miércoles una resolución de condena a la invasión de Ucrania y ha exigido a Rusia la retirada inmediata de sus tropas. Además, las acciones de las tropas rusas serán analizadas por el Tribunal Penal Internacional (TPI) como posibles "crímenes de guerra". "Lo peor está por llegar", aseguró el presidente francés, Emmanuel Macron, tras hablar por teléfono con su homólogo ruso. Por su parte, la OTAN ha decido este viernes que ningún avión aliado sobrevuele el espacio aéreo de Ucrania ni que entren allí sus tropas. "No queremos ser parte del conflicto con Rusia en Ucrania", ha señalado su secretario general, Jens Stoltenberg.
Refugiadas, víctimas de la guerra y denuncias de racismo
Mientras tanto, la población civil de Ucrania y de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk sigue sufriendo las consecuencias de la guerra. Según los datos actualizados este jueves por el Alto Comisionado de la ONU para las personas Refugiadas (ACNUR), son ya 1,2 millones las personas que han tenido que huir de sus hogares desde el 24 de febrero, más de la mitad de ellas hacia Polonia. En Hungría se superan las 145.000. Moldavia, Eslovaquia y Rumanía han registrado 103.000, 90.000 y 57.000 refugiadas este miércoles. A estas, se suman otro millón y medio de personas desplazadas forzosas desde que estalló el conflicto bélico en 2014 en el Donbass.
A todo esto se unen las múltiples denuncias por discriminación, racismo y malos tratos hacia personas migrantes en la frontera de Ucrania. Personas que tratan de abandonar el país en guerra, y a las que las autoridades ucranianas no dan prioridad. "Se linchó a varias personas en las redes sociales acusándolas de inventarse los casos de discriminación en las fronteras de Ucrania que denunciaban varias personas migrantes y estudiantes africanos y asiáticos. Ayer lo denunció la ONU. Hoy sale en toda la prensa", ha criticado el periodista Miquel Ramos.
La policía ucraniana ha sido acusada de segregar racialmente a los refugiados en la frontera.
Una mujer saudí que vivía en Kiev, dice que estuvo retenida en el control fronterizo durante días mientras se priorizaba a los ucranianos blancos. https://t.co/vr6vfIvKpQ
— Miquel Ramos (@Miquel_R) March 2, 2022
Respecto al balance de víctimas por los ataques, en esta semana, al menos 331 personas civiles han muerto, incluidas 15 menores, y 675 han resultado heridas -28 menores-, según los datos dados por la ONU este viernes. "Es probable que la cifra real sea mucho mayor", advierten desde la oficina de derechos humanos de Naciones Unidas (ACNUDH), para añadir que la mitad de las víctimas se produjeron en Donetsk y Lugansk. Desde 2014, la ONU estima en más de 14.000 las víctimas mortales. Asimismo, la OMS ha confirmado el ataque a un hospital en Ucrania durante la semana pasada "en el que murieron cuatro personas y diez resultaron heridas, incluyendo a seis trabajadores sanitarios". Las autoridades ucranianas elevan la cifra a más de 2.000 civiles muertos desde el jueves, mientras los partes de guerra rusos insisten en que no están atacando instalaciones civiles, sino únicamente militares. El Ministerio de Defensa de Rusia ha admitido este miércoles, por vez primera, la muerte de 498 soldados rusos, además de 1.597 militares heridos.
Bloqueo al acceso de siete bancos rusos a Swift y suspensión de las emisiones de RT y Sputnik
Al mismo tiempo, se suceden las medidas de castigo contra Rusia por parte de numerosos estados, que se extienden ya al boicot a la cultura, el cine, la música y el deporte, penando a todo un pueblo en una deriva peligrosa, la rusofobia.
Las sanciones económicas ya han llegado a siete bancos rusos, que han sido expulsados del sistema Swift, la principal herramienta internacional de pagos entre entidades financieras. En esta lista están Bank Otkritie, Novikombank, Promsvyazbank, Bank Rossiya, Sovcombank, Vnesheconombank (VEB) y VTB, pero no se incluye a Sberbank, la mayor entidad rusa, ni a Gazprombank, para "no dificultar las operaciones de compra de gas y petróleo por parte de los países europeos" porque "procesan gran parte de las operaciones energéticas con el bloque comunitario", según han reconocido fuentes de la UE. Además, la suspensión de las actividades en Rusia de las principales compañías navieras y de otras empresas extranjeras –como las grandes energéticas y petroleras–, golpeadas por las sanciones y presionadas por sus gobiernos, afectará a balanzas comerciales, inversores y consumidores a nivel global, según informa Naiz.
En la misma línea de sanciones, este miércoles, los países de la Unión Europea aprobaban la suspensión, que ya es efectiva, de las emisiones en Europa de la agencia rusa Sputnik y el canal de televisión Russia Today (RT), una medida duramente criticada por atacar al derecho a la información, la libertad de expresión e imponer el pensamiento único. Redes sociales como Twitter, YouTube e Instagram han bloqueado las cuentas de estos medios de comunicación. Los 27 también han dado luz verde a sanciones contra dirigentes bielorrusos y sectores económicos del país "por su colaboración en la invasión militar rusa de Ucrania", en el mismo día en el que el Gobierno español anuncio la entrega de armas, de forma bilateral, a Ucrania después de decir que no lo haría.
El ataque de Rusia a Ucrania se inició en la madrugada del pasado jueves, 24 de febrero, 48 horas después del reconocimiento del Kremlin a la independencia de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. Desde entonces los acontecimientos se han ido produciendo en cadena. El viernes, el presidente ruso, Vladímir Putin, llamó al Ejército ucraniano a tomar el poder, y el domingo dio un paso más al poner en "alerta especial" a las Fuerzas de Disuasión Estratégicas, que incluyen armas nucleares. Entre medias, el sábado, el Ministerio de Defensa de Rusia ordenaba a su Ejército iniciar una ofensiva "en todas las direcciones".
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