El consejero de Educación del Gobierno de Aragón, Felipe Faci, afirmó este lunes que "son más los centros que han recuperado el cien por cien de la presencialidad en las aulas después de Navidad que los que tienen dificultades" y para estos últimos ha manifestado "que se pueden planificar clases en horario de tarde" y "pondremos los recursos necesarios, si ésta es la solución".
Ante las declaraciones de Faci, realizadas en una rueda de prensa en la que hacía referencia a la vuelta de la presencialidad total en las aulas aragonesas en los cursos de 3º y 4º de ESO, así como en 1º de Bachillerato, el sindicato CGT Enseñanza ha criticado que "vuelve a poner de manifiesto su improvisación y una falta de criterio muy preocupante", lo que "está poniendo en grave riesgo a la comunidad educativa", ya que "está ocasionando que una gran cantidad de centros educativos están sumidos en el desconcierto por la imposibilidad de adoptar las medidas de reagrupamiento que se están imponiendo desde el Departamento de Educación".
Desde el segundo sindicato en representación en la mesa sectorial recuerdan que, durante las mesas de negociación de este verano, se puso sobre la mesa la posibilidad de establecer clases por la tarde "a lo que los responsables del Departamento se negaron tajantemente". En sentido, critican que "resulta paradójico que lo que no valía para el verano se intente implementar en el mes de enero. Se puede comprobar en las actas de la mesa sectorial del día 31 de julio cómo miembros de la Consejería señalaban la imposibilidad de aplicar esta medida".
En la misma línea, a CGT Enseñanza le resultan "incomprensibles" las palabras de Felipe Faci en las que hace referencia a la utilización de todos los recursos necesarios para ofrecer clases por la tarde si esta fuese la solución. "Esta idea desenmascara toda la política llevada a cabo por la DGA en materia educativa, puesto que nunca se ha tenido en mente invertir todo lo necesario, sabiendo el coste que podría suponer tanto para el alumnado como para el colectivo docente y no docente", afirman.
Por otro lado, fuentes sindicales insistían en que "la presencialidad en las aulas ha sido una decisión política, ni sanitaria ni científica, como se ha demostrado en las medidas aplicadas por los países de nuestro entorno" y, según el propio sindicato docente, se debería de acabar con ese mantra de la seguridad en los centros educativos porque "los datos lo desmienten: en el estudio de seroprevalencia realizado por el Ministerio de Sanidad antes de Navidad, el colectivo docente suponía entre el 11 y el 12% de todos los profesionales contagiados, sólo por detrás de sanitarios y cuidadores domiciliarios".
Desde el propio sindicato se señala que existe una gran preocupación en los centros educativos. "Estamos recibiendo gran cantidad de mensajes de los equipos directivos mostrando sus quejas ante esta situación y no se explican cómo el consejero pudo hacer un anuncio de esas características antes de las navidades, con los datos de contagios que se preveían después de estas fechas", por lo que según relata este colectivo de docentes "pone de manifiesto que su idea era llevar a cabo esa acción, por encima de otras recomendaciones de expertos y científicos en la materia".
Por último, CGT Enseñanza informa que va a ampliar la denuncia que presentó a Inspección de Trabajo el 11 de agosto de la que "incompresiblemente no hemos recibido respuesta todavía", lo que pone de manifiesto, según el sindicato, "la sensación de indefensión que sufre el colectivo docente y no docente". Desde el sindicato creen que ha llegado el momento "de que se tomen las medidas necesarias para que la educación presencial pueda ejercerse con total seguridad para toda la comunidad educativa".
CGT Enseñanza ya instó este pasado fin de semana al departamento de Educación a "abandonar la política espectáculo y a afrontar de manera responsable la seguridad de las escuelas". Asimismo, tal y como informaba este Diario Libre el sábado, a nuestra redacción siguen llegando cartas de diferentes centros educativos en las que se critica la vuelta a la presencialidad en las aulas dictada por el Gobierno de Aragón y en las que reclaman "educación con seguridad".