Ante este escenario, y según apuntan desde CGT, “el Departamento de Educación se comporta de espaldas a la realidad”. Para el segundo sindicato docente, “el mantra de que en la escuela no se producen contagios debe ponerse en cuarentena. Si atendemos a la cuarta ola del estudio de seroprevalencia del Ministerio de Sanidad de diciembre de 2020, el colectivo docente es, con entorno a un 11%, el tercero en contagios tan sólo por detrás del personal sanitario y el de atención domiciliaria”.
Tal y como señalan desde CGT, “según los datos oficiales, durante el primer trimestre de curso se alcanzaron casi los 900 docentes contagiados”, y añaden que “los contagios por COVID han obligado a que esta semana las aulas cerradas hayan pasado de 9 a 34, casi cuadriplicándose”.
Desde el sindicato reconocen “el celo del conjunto de la comunidad educativa”, pero no pueden sino denunciar “la irresponsable política del Departamento en materia de seguridad laboral”.
Para el sindicato, estos alarmantes datos, junto la ineficaz gestión del Departamento, ponen en duda la idoneidad del retorno a la presencialidad impuesto por la consejería a partir de febrero. Desde CGT critican que “se pretenda retornar a la presencialidad en 3º, 4º de Eso y 1 de Bachillerato sin haber tomado previamente las medidas oportunas, como la habilitación de nuevos espacios, la reducción de ratios y el incremento del profesorado”. Es más, para la CGT, “resulta sorprendente que en las nuevas instrucciones no se concrete la distancia de seguridad, previamente establecida en 1,5 metros, lo que genera nuevas dudas sobre las intenciones y capacidades del Departamento”. En este sentido, recuerdan que “los próximos días CGT va a ampliar la denuncia presentada a Inspección de Trabajo por vulnerar la seguridad del colectivo docente, incluyendo las nuevas condiciones derivadas de la presencialidad completa”.
CGT denuncia que “la improvisación del Departamento va a generar masificación en las aulas de numerosos centros, tal y como están poniendo de manifiesto diversos equipos directivos”. A este respecto, añaden que “ya son varios los equipos directivos, claustros y AMPAS que se están movilizando para reivindicar mayores medidas de seguridad, como en el IES Azucarera, el IES Avempace o el IES Clara Campoamor en Zaragoza, así como el IES Conde de Aranda de Alagón”. Para el sindicato docente “es necesario que el conjunto de la comunidad educativa defienda unas condiciones de trabajo seguras, por lo que animamos a todos los centros a mostrar su malestar”.
Ante la evolución pandémica, desde CGT exigen que “el Departamento aplique de una vez por todas una serie de medidas básicas y fundamentales para procurar la seguridad de las escuelas”. Del mismo modo, insisten en “la necesidad reducir ratios, de proteger a los trabajadores especialmente sensibles, de dotar a todo el colectivo docente de mascarillas FPP2 -las únicas homologadas como EPI-, establecer una mayor coordinación de los servicios médicos y de salud pública, así como intensificar los rastreos y cribados en las aulas”.
Por último, la CGT insta al departamento de Educación a “abandonar la política espectáculo y a afrontar la realidad, implicándose de manera responsable en la seguridad de las escuelas”.