Zaragoza se organiza para paralizar el nuevo intento de desahucio de Esperanza

Tan solo 72 horas después de paralizar el desahucio, el juzgado de Zaragoza autorizaba el uso de la fuerza para desalojar a Esperanza y sus tres hijos y lo hacía con una horquilla de 10 días para “esquivar la solidaridad y el apoyo” recibido en el anterior intento. Ahora desde Stop Desahucios hace llamamiento para hacer turnos frente a la vivienda.

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Foto: Stop Desahucios.

Poco duró la alegría de la pequeña victoria frente a SAREB. El lunes 29 de junio, de forma sorprendente y en menos de 72 horas, el Juzgado de Instrucción Nº4 de Zaragoza señaló de nuevo el desahucio de Esperanza de la vivienda de la SAREB en la que habita desde hace unos años con sus hijos en el barrio de Torrero. Y, según explica STOP Desahucios, lo hizo autorizando el uso de la fuerza (policía) del 1 a al 10 de julio para proceder al desalojo. “Una horquilla de 10 días para esquivar la solidaridad y apoyo popular demostrado en el primer intento de desahucio. 10 días para asegurar que se produce la violación de los derechos más elementales. ¿Quién con un mínimo de dignidad puede aceptar esto?”, denuncian desde la plataforma antidesahucios.

El 7 de julio también se espera el desahucio de Hussein y su familia de su vivienda de alquiler, una familia refugiada siria que, para Stop Desahucios, “han comprobado en sus propias carnes la extraña hospitalidad patria”. Esta es la primera de un importante número de familias refugiadas incapaces de pagar rentas imposibles: a Hussein tras terminarse la protección del “programa de refugiados” le ha quedado una renta de alquiler de más de 700 euros.

Por otro lado muchas familias aragonesas están sufriendo “los actos de piratería de las entidades financieras, con Ibercaja a la cabeza”, que no son otra cosa que venta de los inmuebles a fondos buitre y especuladores locales, ruptura de procesos de negociación o bullying hacia las familias… Como son los casos de Ruth y José o Aminata y Moussa.

#EsperanzaSeQueda es un símbolo en Aragón

Por ello, para Stop Desahucios, #EsperanzaSeQueda es ya un símbolo en Aragón. Se trata del primer desahucio paralizado por la movilización social una vez pasado el estado de alarma, “de no pararlo vendrán muchos más después. Algo que no nos podemos permitir como sociedad en medio de una profunda crisis que amenaza con un cataclismo en materia de vivienda”.

A la asamblea no han faltado distintos colectivos de la ciudad, como el 8M, el CUT, Movimiento nadie sin hogar, Pensionistas o personas de las Redes Vecinales que han respondido a la llamada de solidaridad, “además de comprometer su apoyo y animarnos con sus intervenciones”.

Así se ha decidido realizar una convocatoria del 1 al 10 de julio en el domicilio de Esperanza para arroparla y denunciar la actitud de las administraciones públicas. Desde este miércoles por la noche se está pidiendo la colaboración de personas y colectivos dispuestos a estar presentes por turnos.

“Pero no solo haremos esto”, en la asamblea el tono general fue “de hasta aquí hemos llegado”. Si el desahucio de Esperanza se produce arrancará de inmediato una campaña de movilización general con acciones que señalen a los responsables y exijan el inmediato punto final a la vulneración de los Derechos Humanos que suponen los desahucios. Para ello extenderán la colaboración con el resto de plataformas, así como profundizarán la coordinación con otros colectivos y movimientos en el Plan de Choque Social.

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Parar el desahucio es una cuestión política

En Aragón todas las familias vulnerables tienen derecho a una alternativa habitacional en caso de pérdida de su vivienda habitual. Lo dice el artículo 19.2 de la Ley aragonesa conocida como “10/16”. Sin embargo, los poderes públicos y el propio Gobierno de Aragón están actuando vulnerando este derecho reconocido como demuestra el caso de Esperanza y sus tres hijos -y lo han demostrado otros casos anteriores al coronavirus-.

“Sabemos que disponen de herramientas legales y que podrían multiplicar la inversión en garantizar el derecho a la vivienda en Aragón. Cuando hablamos de derechos humanos no hay excusas, no hay nada en que ampararse para su vulneración. Y quienes lo hacen desde las instituciones demuestran una profunda falta de empatía con sus iguales. No es solo una cuestión política, es también una cuestión de dignidad personal. Vamos a exigir esa dignidad a quienes ostentan la representación del pueblo aragonés en las Cortes de Aragón”, aseguran desde Stop Desahucios que ya han iniciado las negociaciones.

Petición de reunión urgente a los grupos de las Cortes de Aragón

Por ello, Stop Desahucios Zaragoza, en paralelo a la preparación de movilizaciones, ha enviado una petición de reunión urgente a todos los grupos políticos de las Cortes de Aragón. “Creemos que tienen ante sí una buena oportunidad para demostrar su compromiso con los derechos humanos y el derecho a la vivienda. ¿Para que ser cómplices de la lacra social de los desahucios pudiendo participar en la solución?”, denuncian.

La plataforma quiere finalizar su comunicado con un llamamiento a la ciudadanía para que participe en todas las convocatorias que en defensa del derecho a la vivienda se realicen en próximas fechas.

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