La Comisión de Salud Pública, en la que están representadas los gobiernos territoriales y el Ministerio de Sanidad, ha acordado "por unanimidad" reducir a siete días, frente a los diez actualmente fijados, el aislamiento obligatorio de todas las personas positivas por COVID-19 que no tengan síntomas. La norma se aplicará desde este jueves con los casos que se diagnostiquen ese mismo día.
Además, la ministra de Sanidad Carolina Darias ha señalado en rueda de prensa, este miércoles tras la reunión de la Comisión, que no se exigirá otra prueba para poner fin a este aislamiento de las personas positivas asintomáticas.
En el caso de las personas positivas con síntomas deberán mantener el aislamiento hasta tres días después de la desaparición de los síntomas, con un mínimo de siete días confinadas. Si una persona se realiza una prueba de antígenos y es positiva, deberá aislarse y comunicarlo al sistema sanitario.
Igualmente las personas no vacunadas que han sido contactos estrechos de un positivo y no presenten síntomas también verán reducido su período de cuarentena hasta los siete días, en comparación con los diez hasta ahora. En este colectivo estaría, entre otros, los niños y las niñas menores de 12 años que aún no han recibido la vacuna.
La norma ya establecía que las personas vacunadas que eran contacto estrecho no tenían que hacer cuarentena, pero durante los diez días posteriores al último contacto deberán extremar las precauciones y reducir todo lo posible la interacción social, utilizando de forma constante la mascarilla.
Se considera "contacto estrecho" a cualquier persona que haya estado en contacto con un caso positivo, sin las medidas de protección, en las últimas 48 horas.
La ministra ha justificado esta decisión apelando a que ómicron tiene un "menor período de incubación" que las variantes anteriores. No obstante, ha añadido que será necesario "monitorizar la evolución de ómicron día a día, con especial seguimiento a la positividad, hospitalización y UCI". Una decisión que se toma en un momento de explosión de contagios, "tsunami" como lo ha descrito la OMS, y que en Aragón está dejando cifras nunca vistas antes: 4.475 nuevos positivos este miércoles y 5.760 este jueves, pero con menor número de hospitalizaciones respecto a hace un año, aunque con una alta presión en la Atención Primaria.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, había avanzado este miércoles por la mañana que la decisión se iba a tomar y que iría en línea con lo establecido en otros lugares, como Estados Unidos, donde se ha reducido el aislamiento hasta cinco días. "Seguimos trabajando y tomando medidas. Eso es lo que está haciendo el Gobierno en ese ejercicio de cogobernanza para hacer frente a la pandemia", había asegurado Sánchez, incidiendo en que resulta "evidente" que la situación es diferente a la del año pasado. "Estamos más preparados y mejor protegidos, porque tenemos a más de un 90% de personas vacunadas con pauta completa y el 80% de mayores de 80 años con la dosis de refuerzo", había manifestado antes de indicar que "la mayor parte de casos ahora son asintomáticos".
No obstante, todos estos cambios en los protocolos también están incrementando las dudas y la incertidumbre de la ciudadanía. Unos cambios que llegan apenas 24 horas después de la modificación del criterio de seguimiento en Aragón por el que sólo se realizará el rastreo en personas convivientes, mayores de 65 años, personas vulnerables (embarazadas y personas crónicas), personas que vivan en residencias y trabajadores y trabajadoras sanitarias y sociosanitarias. En este sentido, IU ha exigido que no se renuncie a la prevención en la séptima ola de Covid-19 y considera que el nuevo criterio no servirá para vencer a la pandemia, ni para descongestionar la Atención Primaria.
Reducción de aforo: 75% en estadios y 50% en pabellones
Por otra parte, en la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de este miércoles también han acordado que el aforo quede restringido a un máximo de un 75% en los estadios deportivos y a un 50% en los pabellones. A partir de esta decisión, cada gobierno territorial podrá ampliar más las restricciones de aforo. Esta medida estará vigente, al menos, hasta el 31 de enero.
Sobre la vuelta al cole
El martes 4 de enero, Sanidad y los gobiernos territoriales se volverán a reunir para analizar el regreso a las aulas tras las vacaciones navideñas. En principio, los territorios apuestan por no retrasar el regreso a las clases y por la presencialidad, entre ellos Aragón, pero quieren que haya coordinación para saber cómo actuar de cara al 10 de enero, fecha fijada para la vuelta al cole de niñas y niños.
El Ministerio de Sanidad es el que tiene competencia para decidir qué medidas deberían llevarse a cabo a nivel sanitario en los centros educativos, pero estas han de tratarse conjuntamente con Educación, como así se ha ido realizando desde el inicio de la pandemia. Es probable que esto sea debatido en la reunión que el miércoles, 5 de enero, mantendrá el Consejo Interterritorial del Sistema de Salud (CISNS).