Según las últimas informaciones del Gobierno de Aragón, se han revisado los criterios de investigación de contactos de positivos de COVID-19, de modo que sólo se realizará el rastreo en personas convivientes, mayores de 65 años, personas vulnerables (embarazadas y personas crónicas), personas que vivan en residencias y trabajadores y trabajadoras sanitarias y sociosanitarias.
En la ‘Estrategia de detección y control del COVID’ aprobada por el Ministerio español de Sanidad, a día 22 de diciembre de 2021, ya se recogía esta posibilidad. Cada territorio podía modificar este protocolo si la transmisión comunitaria se veía aumentada, para mejorar las capacidades del sistema de Atención Primaria.
El personal sanitario viene advirtiendo estar sobrepasado ante la "peor ola" en Atención Primaria en Aragón, por las cientos de PCR y test de antígenos que se realizan cada día, la vacunación y la atención a otras patologías en una época marcada por las bajas -600 sanitarios y sanitarias están ahora de baja por covid en Aragón-, las libranzas del personal y el fin de los contratos covid. También critica que los centros de salud están soportando "el 90% de la carga asistencial".
El Departamento de Sanidad habilitó desde la pasada semana tres puntos nuevos para la realización de pruebas PCR en el sistema hospitalario en Zaragoza –Hospital Miguel Servet, Hospital Clínico y Hospital Royo Villanova (que comienza el próximo lunes )– con el objetivo de "aliviar la carga" de trabajo de Atención Primaria. Estos tres hospitales reciben a pacientes que han sido derivados por el personal médico de los centros de salud.
Además, la alta incidencia de covid que registra Aragón se traduce en una mayor actividad en el servicio 061 Aragón, cuyo Centro Coordinador de Urgencias (CCU) por covid-19 tuvo que reabrirse el pasado 22 de diciembre, llegando a recibir unas 4.000 llamadas el lunes.
Vuelven las restricciones a Aragón
El Gobierno de Aragón también ha modificado las restricciones por COVID-19 en cuanto a hostelería y ocio nocturno. Se adelantan los cierres de la hostelería, a las 00.00 horas -excepto en Nochevieja que podrán cerrar dos horas más tarde-, y el ocio nocturno, a las 2.00 de la madrugada. Y se establece la limitación de un máximo de 10 personas por mesa, garantizando la separación de metro y medio entre ellas, eliminando el consumo en barra. Dado que no se permitirá el consumo en barra o de pie, tampoco se podrá bailar. Además, la mascarilla sigue siendo obligatoria en interior, y también en exteriores con algunas excepciones.
En los gimnasios y equipamientos equivalentes los grupos para la realización de actividades físico-deportivas dirigidas en espacios cerrados tendrán una participación máxima de diez personas. En el caso de los eventos multitudinarios, estos deberán contar con autorización previa y con planes de prevención en el caso de que superen las 250 personas en el interior y 500 en el exterior. Y se prohíbe el consumo de comida o bebida en espectáculos, cines o teatros con butacas preasignadas.
Se mantienen los supuestos en los que hasta ahora se exigía el certificado COVID y se recuerda a los titulares de establecimientos o espectáculos que pueden exigirlos al amparo del derecho de admisión.
