Sánchez justifica la vuelta al trabajo no esencial asegurando que nos encontramos en "una guerra total"

El presidente del Gobierno español vuelve al lenguaje belicista para justificar el retorno de miles de personas a sus puestos de trabajo de actividades no esenciales. Asimismo, ha asegurado que "no estamos en la fase de desescalada" y ha pedido "unidad" para un "pacto de reconstrucción económica y social". "Primero la vida. Después la economía", son algunas de las voces críticas de varias dirigentes de Unidas Podemos.

Pedro Sánchez. Foto: Moncloa

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha afirmado este domingo que "no estamos entrando en la segunda fase", la llamada fase de "desescalada", porque "prosigue el estado de alarma y continua el confinamiento general" que se mantendrá "como mínimo" durante otras dos semanas, a pesar de que entre este lunes y martes miles de personas tendrán que volver a sus puestos de trabajo de actividades no esenciales.

"Si ganamos terreno al virus y nuestro sistema de salud recupera tono, avanzaremos en la desescalada. Si no es así, quiero ser muy claro: mantendremos o reforzaremos las restricciones. Lo primero, siempre, será la salud y la vida de nuestros conciudadanos", ha subrayado en rueda de prensa telemática desde Moncloa tras reunirse por videoconferencia con las y los presidentes territoriales.

Sánchez ha anunciado el final del "periodo de suspensión excepcional de actividades no esenciales" y ha avanzado que el regreso a la normalidad será "progresivo y cauteloso". "El confinamiento general será la regla durante al menos dos semanas más y solo estarán exceptuadas del confinamiento las salidas relacionadas con los trabajos autorizados o las compras permitidas y ni una sola más", ha insistido.

El jefe del Ejecutivo se ha referido así a la nueva prórroga del estado de alarma, hasta el 26 de abril, en el que "determinados sectores productivos" reanudarán su actividad desde este lunes, lo que supone de facto volver al confinamiento inicial decretado el 14 de marzo. Una decisión que ha sido muy criticada por lo prematura y porque podría volver a disparar la curva de contagios, pero que Sánchez ha justificado asegurando que "nos basamos exclusivamente en los criterios de los científicos".

Asismismo, ha manifestado que "lo que está viviendo el mundo entero no es un accidente ni una calamidad, estamos viviendo algo sin precedentes". En su opinión, "la tarea es ingente, será larga y necesitará de la capacidad y el talento de todos. Estamos inmersos en una guerra total que nos incumbe a todos y la respuesta debe ser común", ha dicho manteniendo el lenguaje belicista que viene marcando todas las comparecencias oficiales del Gobierno desde que se inició la crisis sanitaria.

Lenguaje belicista que también están empleando otros presidentes y jefes de gobierno de distintos países europeos, excepto el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, que, tal y como publica Naiz, ha dejado en evidencia a quienes utilizan un tono bélico al dirigirse a la ciudadanía en esta crisis sanitaria, al asegurar que la pandemia del Covid-19 "no es una guerra", sino que supone "un test sobre nuestra humanidad".

Sánchez pide "unidad y apoyo" para un "pacto de reconstrucción económica y social"

En su comparecencia, el presidente del Ejecutivo español también ha vuelto a pedir "unidad" a todos los partidos para lo que ha llamado una "desescalada política". "La desescalada en la tensión política debe empezar ya, cuanto antes. Y debe dar paso a la unidad, al diálogo, al consenso y al acuerdo", ha recalcado.

"Debemos empezar ya la desescalada en la tensión política; deben quedar atrás las palabras gruesas, el lenguaje agresivo. Por parte de todos. Y me comprometo a ser el primero en trabajar en ello por mi responsabilidad como presidente del Gobierno", ha insistido Sánchez.

En este sentido, ha anunciado que en los próximos días se reunirá con todos los partidos políticos y los agentes sociales para "impulsar los nuevos pactos de la Moncloa que sienten las bases de la reconstrucción económica y social" del Estado español por la crisis del coronavirus.

Este mismo mensaje es el que ha trasmitido este domingo a las y los presidentes territoriales. "Les he manifestado además que el acuerdo para la reconstrucción que precisamos solo alcanzará plenamente sus objetivos con la participación del principal partido de la oposición", ha explicado en su comparecencia desde La Moncloa.

"Dentro de unas semanas concluirá el confinamiento y entraremos de lleno en la fase de la reconstrucción. La mejor noticia que podrían recibir los españoles al salir de sus casas es saber que sus representantes políticos han sido capaces de superar diferencias y diseñar juntos un gran plan para volver a poner en marcha el país", ha añadido.

Un plan que, según Sánchez, tendría que contar con "las propuestas de todos, el concurso de todos, la unión de todos", o "al menos a todos los que estén dispuestos a colaborar, cuantos más mejor", ha remarcado.

"Primero la vida. Después la economía"

Entre las voces críticas a la decisión del Gobierno español de que la nueva prórroga del estado de alarma, que se acaba de aprobar hasta el próximo 26 de abril, incluya la reanudación a partir de este lunes de la actividad en determinados sectores productivos no esenciales, se encuentran varias dirigentes de Unidas Podemos que han afeado la medida a través de las redes sociales.

"Resulta indescriptible que no puedas estar con tus padres que se mueren el domingo y el lunes puedas estar con tus compañeros de trabajo", ha escrito en Twitter la directora del Instituto de la Mujer, Beatriz Gimeno, algo que considera "difícil de tragar". Por su parte, la secretaria de Círculos y Participación de Unidas Podemos, Ana Marcello, ha tuiteado: "En este orden por favor: Primero la vida. Después la economía".

Por su parte, El lehendakari Iñigo Urkullu ha reclamado "certezas" a Sánchez para una "colaboración eficiente y efectiva" y ha pedido claridad al Ejecutivo español sobre "mascarillas, test y distribución de suministros". "Primero coordinación y, luego, comunicación. No al revés", ha pedido.

El president de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido a Sánchez que rectifique su decisión de que vuelva a movilizarse, a partir de este lunes, el personal laboral de actividades no esenciales y que se prorrogue la parálisis al menos dos semanas más. Para Torra es "una temeridad y una imprudencia absoluta", porque crecerá el riesgo de contagios pese a que "el 89% de las UCI están ocupadas" en Catalunya y también ha pedido test masivos para la población.

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