Sánchez dibuja un gobierno socialdemócrata moderado con llamamientos al diálogo, a la convivencia, y a la pluralidad

El trabajo de partidos como Unidas Podemos, ERC, Teruel Existe, BNG, EH Bildu, o PNV hace que Pedro Sánchez realice una propuesta de gobierno moderado y dialogante, socialdemócrata en las formas y propuestas: estado federal, ampliación de derechos sociales, transición energética, y fiscalidad progresiva como bloques destacados de su discurso

Sánchez
Foto: PSOE

"No se va a romper España. No se va a romper la Constitución. Lo que se va a romper es el bloqueo al gobierno progresista". Así ha comenzado Sánchez este sábado su discurso de investidura. Tras los abucheos de las bancadas donde se sientan los grupos parlamentarios de derecha y ultraderecha, y tras recordar la actual fragmentación política existente en el Congreso español, el candidato ha asegurado que "después del 10N, no cabía otra mayoría parlamentaria que la que vamos a presentar hoy aquí. Es la voluntad de los españoles y de las españolas".

Para Sánchez, los valores que sustentarán el nuevo Gobierno de coalición serán la justicia social, la defensa de los servicios públicos y de la economía social de mercado. "Creemos en la libertad. Por eso, el nuevo Gobierno no será compatible con la Ley Mordaza, con la intolerancia a partidos que no piensan como uno y al cierre de medios de comunicación", ha explicado el líder del PSOE.

Tras estas declaraciones, Sánchez ha entrado en la situación que se vive actualmente en Catalunya y que ha calificado como "una crisis heredada". "Hay que dejar la deriva judicial que tanto dolor ha causado. Hay que retomar el diálogo", ha matizado el candidato.

De la misma forma, el líder del PSOE ha considerado que existe un "sentimiento de agravio" en un sector de la población catalana con respecto a las instituciones centrales. "Existe en otros puntos de España un rechazo a las acusaciones que vierten algunos líderes independentistas sobre la España constitucional, y yo me incluyo entre ellos", ha subrayado.

Todo ello, según ha apuntado, ha derivado en una "incapacidad política para resolver un conflicto que es de naturaleza política". Y ha propuesto "devolver a la política un conflicto político" permitiendo "dejar atrás la deriva judicial que tanta fractura ha causado en buena parte de la ciudadanía". En definitiva, retomar el diálogo y dejar atrás la judicialización del conflicto político, a pesar de las zancadillas de los estamentos judiciales que pretende seguir haciendo política desde los tribunales.

Siguiendo con la cuestión territorial, Sánchez ha hecho referencia a la creación de un Pacto de Estado por la Repoblación y el Reequilibrio Territorial que implicaría la creación de un ministerio para su desarrollo. El texto del pacto dice lo siguiente: "Negociar con el resto de las formaciones políticas la consecución de un Pacto de Estado por la repoblación y el reequilibrio territorial, con la creación de un Ministerio que se encargue específicamente de abordar este reto de forma consciente, decidida e inmediata".

A continuación, y ya en materia social, ha defendido la necesidad de revertir los recortes en los servicios, las brechas existentes en el mercado laboral o la libertad frente a "quienes tienen más poder". Una libertad que, a su juicio, está enfrentada con la ley mordaza o la discriminación por razón de identidad sexual o la violencia contra las mujeres y los niños y niñas.

"El diálogo social deberá abordar muchas tareas, a título de ejemplo, la simplificación y la reordenación del menú de contratos de trabajo, reforzar la causalidad en los despidos". Asimismo, ha propuesto "la eliminación de los cambios que facilitan el despido por absentismo laboral justificado, la recuperación de derechos laborales en los procesos de modificación sustancial de las condiciones de trabajo, así como la revisión de los contratos formativos, incluyendo la aprobación y el desarrollo del Estatuto del Becario".

En el ámbito económico, Sánchez ha anunciado una nueva ley contra el fraude fiscal y la prohibición de "aprobar amnistías fiscales" como la efectuada por el Gobierno de Mariano Rajoy; y ha prometido no aumentar los impuestos a "las clases medias", incrementando por otro lado los impuestos a las rentas superiores a los 130.000 euros anuales, tal y como ha quedado reflejado en el pacto entre el PSOE y Unidas Podemos.

Para el candidato, "las políticas de este Gobierno irán dirigidas a alcanzar la igualdad plena entre hombres y mujeres. También regularemos en el Código Penal que, en el consentimiento sexual, solo 'sí sea sí'". "Los datos siguen siendo estremecedores: llevamos ya más de 50 mujeres asesinadas en lo que va de año (en 2019) y las cifras de condenados por delitos sexuales llevan aumentando un 10% cada año desde 1998", ha recordado.

Y a continuación ha mostrado su rechazo a la gestación subrogada, actuando “contra las agencias que la promueven". "La explotación reproductiva está prohibida en nuestra legislación, y por eso actuaremos frente a las agencias que ofrecen estos servicios a sabiendas de que están prohibidos en nuestro país", ha recalcado.

Continuando con la explicación del programa del nuevo Gobierno de coalición, el candidato ha desgranado algunos aspectos que se recogen en el propio documento firmado por Sánchez e Iglesias. Por ejemplo, ha mostrado su compromiso para la derogación, en esta legislatura, de la actual ley educativa desarrollada por el Partido Popular, la LOMCE.

En su opinión, esta nueva ley "deberá garantizar la eliminación de la segregación". Es decir, dejar de financiar con dinero público a los centros educativos que separen al alumnado por sexo. Respecto a la asignatura de religión, Sánchez ha asegurado que dejará de contar para las calificaciones. Y también se ha comprometido a que la inversión en materia educativa llegue al 5% del PIB en 2025.

En Sanidad, el líder del PSOE ha apostado por avanzar "en el blindaje de nuestro modelo público con una apuesta clara por la gestión pública directa". Cabe señalar que el documento firmado por PSOE y Unidas Podemos, explicita que "se revisará la Ley 15/1997, de habilitación de nuevas formas de gestión del Sistema Nacional de Salud y el conjunto de los mecanismos normativos que abren la puerta a privatizaciones del sistema".

Respecto a cuestiones que atañen a la Memoria Histórica, Sánchez ha reconocido que "la exhumación de Franco inició un camino que ya no tiene vuelta atrás". "El 31 de octubre será el día de reconocimiento para las víctimas del franquismo. El 8 de mayo como el día en memoria de los exiliados. Además, auditaremos los bienes del régimen para devolverlos a sus propietarios, empezando por el Pazo de Meirás", ha añadido.

Además de otras cuestiones recogidas en el pacto firmado por Sánchez e Iglesias, como la regulación de las casas de apuestas; las medidas a adoptar en la lucha contra el cambio climático; la Ley de Ciencia; la lucha contra la pobreza infantil; la subida del Salario Mínimo Interprofesional; la recuperación de los bienes "indebidamente inmatriculados por la iglesia"; y la regulación de los precios de alquiler, el candidato ha subrayado en la parte final de su discurso que su intención es la creación de una mesa de diálogo bilateral con el Gobierno de Catalunya "para resolver el conflicto político que arrastramos, pero dentro de la Constitución". "Esta debe ser la legislatura del diálogo. En particular, del diálogo territorial", ha remarcado el candidato a la presidencia del Gobierno estatal. "Una España descentralizada y federal en una Europa federal y unidad", ha concluido.


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