PP, PSOE y Ciudadanos impiden el cambio de nombre de calles franquistas de Zaragoza

Luisa Broto ha aclarado que el gobierno solo cumplía con la Ley de Memoria Democrática. Sin embargo, por iniciativa del Partido Popular han bloqueado la retirada de las calles de Mariano Homo Liria, Juan José Rivas y Miguel Merino y Rigoberto Domenech.

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Luisa Broto en una imagen de archivo. Foto: Miguel G. García (AZ)

Los grupos municipales de PP, PSOE y Ciudadanos ha aprobado una moción para revocar los cambios de cuatro calles de tres alcaldes y un arzobispo franquistas. La intención del Gobierno de Zaragoza era cumplir con la Ley de Memoria Democrática que exige la retirada de todas las referencias y homenajes a personalidades que formaron parte de la dictadura de Francisco Franco. Sin embargo, por iniciativa del Partido Popular han bloqueado la retirada de las calles de Mariano Homo Liria, Juan José Rivas y Miguel Merino, todos ellos alcaldes franquistas, y la del arzobispo Rigoberto Domenech.

Ahora habían pasado a denominarse Blanca Catalán de Ocón, nacida en Calatayú fue la primera botánica del Estado español, María África Ibarra y Oroz, doctora en Filosofía y letras, Pilar Ponzán Vidal, una exiliada oscense que narró la vida de su hermano que pasó a la historia por ser un héroe de la Resistencia francesa y, por último, Emilio Gastón, fundador de APUDEPA y primer Chusticia d’Aragón tras la dictadura.

Según Jorge Azcón, esta decisión es “miserable” ya que en 2008 se decidió no cambiar las calles de “todas las personas que fueron alcaldes de Zaragoza”. Esta moción ha sido apoyada por el PSOE y Ciudadanos que han criticado que el cambio no haya pasado por la Junta de Portavoces y han calificado la decisión de “sectarismo”. No obstante, Carlos Pérez Anadón ha reconocido que todavía “sigue habiendo calles que cambiar”. Cristina García de Ciudadanos ha rechazado “las formas”, y a pesar de los comentarios de PP y PSOE ha asegurado que cree que todos los grupos habrían apoyado la decisión si se hubiera “informado”.

La respuesta de Zaragoza en Común ha llegado de la mano de la vicealcaldesa, Luisa Broto, que ha negado cualquier “sectarismo” y recuerda que el gobierno simplemente ha cumplido con Ley autonómica de Memoria Democrática que prohibe que se rinda homenaje a políticos o militares afectos al golpe franquista. Asimismo, recuerda que ese periodo abarca desde la Segunda República hasta la entrada en vigor de la Constitución de 1978. Marco temporal e ideológico que afecta tanto a estos alcaldes como al arzobispo.

Por su parte, Carmelo Asensio (CHA) ha votado en contra de la moción del PP y en una defensa por los y las represaliadas del franquismo ha asegurado que es “indigno” que alcaldes franquistas como Gómez Laguna o Cesáreo Alierta sigan teniendo una calle en Zaragoza.

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