Diez organizaciones aragonesistas se han unido, con motivo de la celebración del 20 de diciembre, Día de los Derechos y Libertades del Pueblo Aragonés, para reivindicar la figura de Juan de Lanuza, Chusticia d’Aragón. Este manifiesto conjunto en homenaje al Justiciazgo defiende la identidad del Pueblo aragonés y reafirma su anhelo de trabajar con todos los demás pueblos por un mundo mejor.
Chunta Aragonesista, Alazetal, Estado Aragonés, CUT, Renaxer, Aragón Despierta, OSTA, SOA, Rolde de Estudios Aragoneses y Partido Carlista de Aragón suscriben un texto común, con el objetivo de avanzar en el desarrollo económico, social y cultural de Aragón “a través de una Hacienda Foral, la transferencia de las competencias pendientes, la descentralización de la Justicia, o la soberanía energética”.
El texto conjunto también defiende “el reequilibrio territorial, la justicia social y territorial, y la plena igualdad entre mujeres y hombres de toda clase, origen y condición que encarna el feminismo”.
Además, destaca “la distribución justa y equilibrada de la riqueza, la solidaridad, la erradicación de la pobreza y la marginación, la oficialidad de nuestras lenguas propias, y apuesta por la eliminación de las diputaciones provinciales, potenciando las competencias de las comarcas aragonesas”.
Manifiesto conjunto: + Derechos + Libertades + Aragón
El Pueblo Aragonés toma la palabra otro 20 de diciembre a los pies de la efigie de Juan de Lanuza y Urrea, Justicia de Aragón, para reclamar más derechos, más libertades, más Aragón.
Más derechos porque, atenazados por el fantasma de la guerra y el azote de la crisis, nuestro pueblo los está perdiendo al clamor de los augurios de un Apocalipsis que vendrá si no somos sumisas y sumisos, callando y obedeciendo mientras el oligopolio energético, el lobi bancario y las grandes corporaciones sacan partido de todo ello en forma de beneficios escandalosos, sin precedentes en nuestra historia. Frente al “callar y aguantar” hoy tiene más sentido que nunca que ejerzamos el demonizado derecho a la huelga, que exijamos el denostado derecho a la igualdad en todos los órdenes frente a la brecha de género, el racismo y el machismo y que reivindiquemos el vilipendiado derecho a no vivir pobres y explotados frente a la congelación salarial y los recortes en educación, sanidad o servicios sociales.
Más libertades porque Aragón, a pesar de haber sido históricamente maestro y ejemplo para los demás pueblos y naciones del mundo que aprendieron de nuestra cultura política nacional las ideas de libertad civil, garantías de la persona, Estado de Derecho, imperio de la Ley y equilibrio de poderes frente al despotismo y de la primacía de la paz y el pacto sobre la violencia de todo tipo, desde el Estado español sigue ignorando la plena restitución de sus derechos y libertades nacionales. Queremos que continúe profundizándose en la devolución de nuestras libertades, como la de administrar nuestros propios recursos a través de una Hacienda Foral, la transferencia de las competencias pendientes, la independencia de nuestra Justicia, las inversiones críticas para el desarrollo de nuestro País, o nuestra soberanía energética. Es de Justicia y sostenibilidad reclamar al Estado y a sus servidores de aquí, la preservación y promoción de nuestra cultura en todas sus formas y manifestaciones, la oficialidad de nuestras lenguas propias, la igualdad real de oportunidades de todas las personas y la abolición de las provincias y su integración en un Aragón de comarcas bien gestionadas frente a la lacra del provincialismo, hijo analfabeto del centralismo.
Más Aragón porque aunque, hoy hace tres años, el Estado español quiso volver a matar simbólicamente al Justicia derogando 23 de los 34 artículos de la Ley de Actualización de los Derechos Históricos de Aragón aprobada por las Cortes de Aragón, mal que le pese, podemos proclamar que hemos sido, somos y seguiremos siendo una Nación social y políticamente mucho más avanzada que este Estado injusto, ignorante y miope en el que se nos integró con la violencia de las armas y con las cadenas de la tiranía. Pese a ello, seguiremos luchando de la forma que nos enseñaron nuestros ancestros: con la razón y con la ley, no con la fuerza y la coacción. Los aquí reunidos, no olvidamos que los antiguos Fueros aragoneses no eran otra cosa que la expresión jurídico-política de nuestra tierra y que, por eso, hoy debemos trabajar en la reforma del marco jurídico que una y otra vez se interpone en el camino hacia la recuperación de nuestros derechos y libertades plenas. Esos fueros también inspiraron en su día, siquiera de forma incompleta, a quienes concibieron el Estado constitucional español bajo el que vivimos. Que nuestro empeño de hoy sirva para que este mal alumno mejore su fomento y protección de la convivencia, los derechos y los libertades de naciones como la nuestra los de todas las personas que anhelan una vida mejor.
Entalto Aragón!