La CNT Uesca ha difundido un comunicado en el que afirma que “una vez más, en un ejercicio de responsabilidad y solidaridad de clase nos vemos en la obligación de apoyar y poner el foco sobre los compañeros y compañeras que trabajan en Litera Meat en Binéfar, el ya conocido y más grande matadero de cerdos de Europa".
Aseguran desde el sindicato que “desde su inauguración, en Litera Meat se vulneran de forma sistemática los derechos laborales de la mayor parte de la plantilla, incluyendo los derechos más fundamentales". Así, el grupo “Pini”, propiedad de Mario Pini, hermano del presunto criminal Piero Pini “consigue mantener en unas incuestionables condiciones de explotación laboral a más de 1.600 personas, contra las que además ejerce todo tipo de represión sindical desde sus inicios en 2019”.
CNT remarca que "son incontables las irregularidades que se producen diariamente en este centro de trabajo, muchas de ellas ya denunciadas a Inspección de Trabajo en numerosas ocasiones, que ya ha sancionado varias veces a la empresa sin que las multas parezcan suponerle a Litera Meat un impedimento demasiado grande para seguir quebrantando la ley".
"La triste realidad -continúa CNT- es que existe la violación de los derechos en prácticamente todas las áreas de la actividad laboral: personal obligado a hacer horas extras bajo amenaza de despido (incluso más de 12 horas, seis días a la semana) incumpliendo constantemente la normativa sobre horas extras, vacaciones, festivos, descansos diarios y semanales. Constantes despidos por estar en situación de baja médica (producida precisamente, en muchas ocasiones, por ritmos desorbitados en las cintas de trabajo o por tener que deshuesar piezas de cerdo durante 10 horas al día con cuchillos desafilados), por solicitar permisos para el cuidado de hijos e hijas o familiares a tu cargo o por prácticamente cualquier circunstancia de salud que impida a un trabajador o trabajadora ir a trabajar”, detallan desde el sindicato.
A juicio de la CNT, se trata de “faltas muy graves de seguridad y salud laboral, como por ejemplo en las deficiencias en los EPIS y las herramientas de trabajo o en las ya conocidas aglomeraciones de la plantilla durante los momentos más duros de la pandemia de Covid-19, denunciados a Salud Pública ya que produjeron más de 1.000 infectados en la zona por la cadena de contagios (300 de ellos de la plantilla)".
Durante todo este tiempo el sindicato CNT "ha tratado de apoyar y defender las reivindicaciones de la plantilla, poniendo el foco en los constantes abusos laborales y las relaciones permisivas y cómplices de la administración, el Gobierno de Aragón y los sindicatos mayoritarios con esta empresa". En este sentido, subraya que "algunos de los esfuerzos de la CNT han tenido sus frutos, pues se ha conseguido reconocer la improcedencia de multitud de despidos, evitar otros tantos o bajar la velocidad de las cintas en algunas líneas. Precisamente por la labor desempeñada por los y las compañeras de esta sección sindical es que, en estos momentos, diversas estrategias represivas se están desplegando sobre ellas por parte de la empresa: hostigamiento, sanciones sin fundamento, despidos, aislamiento e incomunicación empiezan a constituir un panorama de auténtica vulneración del derecho a la libertad sindical", afirman en el comunicado.
"¿Cómo puede ser que esta empresa lleve años campando prácticamente a sus anchas, manteniendo unas condiciones laborales casi esclavistas y vulnerando los derechos constitucionales más básicos de cientos de trabajadores y trabajadoras?", se pregunta CNT, que afirma que "esto es posible gracias a la complicidad del Gobierno de Aragón y de los sindicatos UGT y CCOO".
Según la CNT, "la UGT ha ayudado a blanquear la imagen anti-sindical de ‘Pini’, cubriendo con su delegada Lourdes Pérez, empleada de confianza de la familia Pini, como primera representante de la plantilla, mientras el resto de organizaciones de trabajadores se negaron a tomar parte en esas elecciones por su inmoralidad, ya que éstas se realizaron antes de que se pusiera en marcha el matadero”.
Desde CNT también critican que “el sindicato CCOO se adelantó a convocar una huelga cuando veía que el malestar de la plantilla, organizada en buena medida bajo la influencia de la sección sindical de la CNT, era más patente que nunca. Esto le permitió a CCOO desconvocar la huelga sin consultar con la plantilla y aceptando unas modificaciones que en ningún caso mejoraban las condiciones de los trabajadores y trabajadoras, como se está comprobando a día de hoy con la imposición de la famosa ‘bolsa de horas’ que supone, únicamente, la normalización de la jornada de 9 horas”.
Aseguran también “a día de hoy, los nombres de algunos miembros del Comité de Empresa empiezan a aparecer suscribiendo falsas acusaciones contra personas de la sección sindical de CNT, acusaciones en las que, posteriormente, se basan sanciones y en las que, entendemos, pretenderán fundarse despidos disciplinarios en un intento desesperado por alejar de Litera Meat a las personas que luchan contra la explotación”.
Desde CNT denuncian que en el caso de las administraciones públicas y del Gobierno de Aragón “la colaboración es todavía más preocupante, pues, como afirma un artículo publicado en Público: se da la circunstancia de que desde el desembarco de Piero Pini y sus hijos a Binéfar, la empresa ha echado mano de manera recurrente para conceder el desempeño de lucrativos servicios externos tanto a funcionarios de la administración local como a empleadas cercanas a ella y a la formación política que ha facilitado su desembarco, el PSOE. Esta formación política ha tendido una gran alfombra roja para la creación del macromatadero en la localidad con la colaboración de algunos medios de comunicación afines.”
El sindicato también asegura que “incluso el jefe de seguridad privada, Antonio Diez, fue reclutado por Pini entre la propia plantilla de la policía local. También están involucradas en el goloso negocio destacadas figuras del PSOE a nivel local como Rosa Altabás, quién se ocupó de encontrar pisos para la plantilla desde la inmobiliaria que es propietaria. Haciendo que sea casi imposible encontrar un piso en alquiler en kilómetros alrededor”.
“Como podemos ver, el entramado entre el Gobierno, las grandes empresas y los sindicatos mayoritarios, CCOO. y UGT, es una importante maquinaria que permite la explotación laboral y la represión sindical de diferentes formas, unas más sutiles que otras. Ésta es una de las principales razones por las que estamos llegando a esta situación. Este problema no afecta sólo dentro de la empresa, sino que repercute a todo el territorio donde se encuentra implantada y se extiende a través de la administración y los sindicatos mayoritarios creando un ejemplo y un precedente mediante el que consigue que la gente pierda la confianza en las organizaciones de trabajadores y trabajadoras y la lucha por las mejoras laborales, aceptando cada vez condiciones más precarias y normalizando los abusos”, enfatizan desde la CNT.
Finalmente, desde CNT concluyen denunciando “la situación en la que se encuentran los trabajadores y trabajadoras de Litera Meat así como las prácticas anti-sindicales tanto de la empresa, como de CCOO. y UGT que traicionan los verdaderos intereses de la clase trabajadora. Si no apoyamos estas luchas y nos defendemos de la explotación laboral, cada día será más vasto el terreno que las políticas neo-liberales van conquistando, y aún mayores serán nuestras pérdidas de derechos y libertades”.
