Este lunes el viejo e histórico Cine Elíseos se convierte en un restaurante de comida rápida de la multinacional McDonalds. Así lo ha decidido la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza con los votos de PSOE, PP, Ciudadanos y Vox y las abstenciones de Podemos y Zaragoza en Común.
El edificio fue diseñado por el arquitecto Teodoro Ríos Balaguer y el 22 de diciembre de 1944 abrió sus puertas como cine para proyectar ‘Me casé con una bruja’ de René Clair. Una vida de 70 años convirtiéndose en un referente cultural de la ciudad. Cerró sus puertas el 8 de agosto de 2014 con la proyección de ‘Marsella’ de Belén Macías.
Para Fernando Rivarés, concejal de Podemos Zaragoza, esta decisión es “una desgracia cultural y patrimonial” y un ejemplo claro del fracaso de la colaboración institucional “cuando era una oportunidad histórica de salvar el espacio y generar un equipamiento cultural aragonés de primera magnitud”.
Por su parte, el concejal de Zaragoza en Común, Pedro Santisteve, ha calificado como “una vergüenza” que la normativa permita acabar con un equipamiento como este. “Nos recuerda a lo ocurrido con el Fleta. Una vez más, la falta de colaboración institucional entre Ayuntamiento, gobierno de Aragón y gobierno central tiene como consecuencia este tremendo fracaso a la hora de salvar este espacio, del que podríamos haber mantenido sus elementos patrimoniales, y dedicándose, así, a una fonoteca, una filmoteca, una cinemateca o similar”.
Desde el grupo municipal de Podemos Zaragoza se propuso la creación de la Cinemateca Aragonesa integrando en ella la Filmoteca de Zaragoza, única municipal que hay en el Estado español y que aún no tiene espacio propio definitivo, con un nuevo sistema de proyección y asociada al archivo audiovisual aragonés, y que todo esto se albergara en el antiguo Cine Elíseos, pudiendo convertirse además en sede de festivales y espacio cultural.
Esta propuesta se hizo ya en 2018, mediante un proyecto conjunto entre Ayuntamiento de Zaragoza, Gobierno de Aragón y Ministerio de Cultura.
El Ayuntamiento aportaba los recursos técnicos y el rico patrimonio y activos de la Filmoteca y parte de las obras. El Gobierno de Aragón debía convertirse en titular de la Cinemateca y asumir mediante el derecho de tanteo y retracto el espacio, y el Ministerio de Cultura aportaba recursos para una comunidad que no cuenta con este servicio. “El anterior gobierno de Lambán dejó morir conscientemente el plazo de ejercitar su derecho de retracto. Es decir, guardó silencio hasta que prescribió la opción”, critican desde Podemos Zaragoza.
La formación en las Cortes de Aragón presentó junto con IU una proposición de ley que fue aprobada en 2016 pidiendo la conservación y uso cultural del Cinema Elíseos.
La destrucción de los cines Elíseos es para la formación un ejemplo más de la deriva de la ciudad, en esa ruta de la globalización y la pérdida del valiosísimo patrimonio aragonés. Por su parte, Pedro Santisteve advierte que “llegados a este punto, es imprescindible vigilar que se cumplan las prescripciones de la comisión de Patrimonio para salvaguardar estos característicos elementos".
