La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon (SNP), ha presentado al jefe del Gobierno de Londres, el conservador Boris Johnson, la propuesta formal para que acceda a negociar un nuevo referéndum de independencia a finales de 2020.
En una comparecencia en Bute House, la residencia oficial de la ministra principal en Edimburgo, Sturgeon ha afirmado que los resultados del nacionalismo escocés en las elecciones generales del pasado 12 de diciembre (que ganaron 48 de 59 escaños en Escocia, mejorando los resultados de 2017) le otorgan el "mandato" de celebrar un segundo plebiscito a finales de 2020.
La ministra principal y líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP) ha recalcado que el documento con los detalles de la petición se ha enviado a Johnson, del quien espera que rechace la solicitud con el argumento de que ya hubo una consulta vinculante en 2014 en la que el 55% votó en contra de la independencia.
Horas más tarde del anuncio de Sturgeon, el Ejecutivo británico ha rechazado la propuesta de un nuevo referéndum, argumentando que «sería una distracción perjudicial». «Queremos que 2020 sea un año de oportunidad, crecimiento y unidad para Escocia, no de más división», ha afirmado.
Tras la negativa, Sturgeon ha manifestado: "Con cada democracia que niega una expresión como esta, los conservadores aumentarán el apoyo a la independencia". Para añadir: "Escocia dejó muy claro la semana pasada que no quiere un gobierno conservador dirigido por Boris Johnson, que nos saque de Europa".
"Somos una nación, no mejor ni peor que cualquier otra... Como nación, nuestro futuro, sea lo que sea que elijamos, debe estar en manos de las personas que viven aquí", ha subrayado.
No obstante, Sturgeon ha destacado que considerará todas las opciones que estén a su alcance. "Esperaba la oposición, pero esto no es el fin de la cuestión. Y Boris Johnson no debe tener la impresión de que será el fin del asunto", ha zanjado.
