La ciudad de Alagón -capital de la Comarca Ribera Alta del Ebro- ha preparado un completo programa de actividades que ha sido presentado en la sala de prensa de la Diputación de Zaragoza. Comenzará el viernes, 22 de abril, y se extenderán a lo largo de todo el fin de semana. Representaciones teatrales, un mercado medieval, cuentacuentos y mesas redondas, entre otros muchos actos, trasladarán a vecindad y visitantes a este momento histórico para poder conocer todos sus detalles.
“Estoy encantado de presentar la primera edición de esta recreación histórica que va a ser posible gracias al esfuerzo y a la dedicación de muchas personas a las que como alcalde de Alagón quiero expresarles mi más profundo agradecimiento”, ha destacado el primer edil alagonero, Pascual Embid, quien además ha recordado que este tipo de iniciativas ayudan a potenciar el turismo y consolidan al municipio “como referente de la comarca Ribera Alta del Ebro también a nivel cultural”. Por su parte, la concejal de Cultura y diputada provincial Elena García Juango ha subrayado que en la organización de la recreación se ha querido involucrar “a toda la villa de Alagón. Acael se ha volcado con esta primera edición que ojalá sea solo la primera de muchas más”, ha deseado.
La recreación de la boda real de Pedro IV de Aragón y María de Navarra es una iniciativa de la Asociación Cultural Alagonesa de Estudios Locales -Acael- en colaboración con el Ayuntamiento de Alagón, en la que 50 personas recrearán a lo largo del fin de semana los principales momentos de este enlace real. El objetivo es acercar tanto a la vecindad de la localidad como a los visitantes este hecho histórico y resaltar la importancia de la localidad en la Edad Media. Para ello, desde la Acael se ha trabajado en la recogida de datos verídicos sobre este acontecimiento, fundamentalmente procedentes del Archivo de la Corona de Aragón, y se ha diseñado en torno a todo ello un completo programa de actos.
Las actividades comenzarán el viernes, 22 de abril, a las 19.30 horas con el acto inaugural. A continuación, en el Auditorio Celia Sanz y Germán Santabárbara tendrá lugar la mesa redonda ‘Pedro IV de Aragón: su vida y su época’ a cargo de los historiadores Ángel Luis Abós Santabárbara, Francisco Javier González Ruiz, Elías Latorre Pérez y Pilar Pérez Visuales. La entrada será libre.
El sábado, 23 de abril, los actos comenzarán a las 11.00 horas con la denominación del Quiosco de la Música ‘Simón Sanmartín” y la inauguración de una placa conmemorativa de la I Recreación de la Boda Real. A continuación, y a lo largo del día, habrá cuentacuentos, taller de caligrafía, improvisación, teatro y danzas medievales.
El domingo comenzará el día a las 12.00 horas con la actuación ‘Viaje de Cómicos’ y continuará con la presentación y firma de la Carta de Arras y demás actividades para todos los públicos. El acto central tendrá lugar a las 17.00 horas con el cortejo real y la ceremonia del enlace, que finalizará con las danzas medievales.
Además, durante todo el fin de semana estará abierto el mercado medieval en la plaza Alhóndiga, plaza San Antonio, plaza San Pedro, y replaceta Virto de 11.00 a 21.00 horas, con más de 45 puestos entre comercio local, artesanía, alimentación, tabernas y talleres.
Los hechos históricos
El 25 de julio de 1338 tuvo lugar en Alagón un acontecimiento nada común: el enlace matrimonial del rey Pedro IV de Aragón con la infanta María de Navarra.
Pedro IV, llamado ‘El Ceremonioso’, era rey de Aragón, Valencia y Mallorca, y conde de Barcelona, duque de Atenas y Neopatria y conde de Ampurias. Tenía en esos momentos 19 años y ese sería su primer matrimonio. María era hija segunda de los reyes de Navarra Juana II y Felipe III, y aunque su hermana Juana era la primogénita, la elección recayó en ella cuando Juana profesó vida religiosa renunciando a sus derechos dinásticos. María tenía 12 años cuando contrajo matrimonio y recibió como dote de su esposo las villas de Chaca, Teruel y Tarragona. El enlace tenía como objetivo establecer una alianza que asegurara la paz entre ambos reinos.
En la primavera de 1338, María emprendió viaje desde tierras francesas y, tras una estancia en Tudela, continuó hacia Zaragoza, donde, en un principio, se iba a celebrar la ceremonia. Al no encontrarse bien de salud, María tuvo que detenerse en Alagón. Pedro IV acudió a la villa y fue allí donde se celebró la boda real.
La concurrencia a la ceremonia fue extraordinaria, congregando a prelados, infantes, procuradores, nobles… tanto de los reinos de Aragón y Navarra como del de Castilla. Los nuevos esposos permanecieron varios días en Alagón como quedó constancia en diversos documentos.
