A otra cosa. La primera votación para que Mariano Rajoy accediera a la presidencia del gobierno ha resultado infructuosa. El siguiente paso llegará el próximo viernes 2 de septiembre a las 19.00 horas. Una segunda votación en la que el candidato necesita únicamente más votos a favor que en contra. Veremos lo que sucede. De momento, y a la vista de lo acontecido durante la maratoniana jornada de este miércoles, Rajoy lo tiene muy difícil, por no decir imposible. Por eso la sombra de unas terceras elecciones, en caso de que Pedro Sánchez no se atreva a liderar una alternativa, son cada vez más cercanas.
El debate. Analizando lo que ha dado de sí la jornada parlamentaria, se podría afirmar, sin temor a equivocarse, que todo sigue igual. Cada partido ha mantenido sus posiciones, unas posiciones ya conocidas de antemano. Y al fin y al cabo, como nadie escondía ases en la manga -veremos mañana-, ni estaba previsto ningún acto de desobediencia por parte de los diputados y diputadas de cada fuerza política, el resultado ha sido el esperado. Todo muy previsible.
Rajoy cree necesario desbloquear la situación a cualquier precio y para eso solicita la colaboración del PSOE. Pedro Sánchez mantiene su negativa al líder popular porque lo único que propone es “continuismo”. Pablo Iglesias no iría con el PP “ni a la vuelta de la esquina”. Y Albert Rivera se muestra muy “orgulloso” de los pactos alcanzados con el PP ahora, y con el PSOE antes. Así pues, nada nuevo que no se supiera ya. Toma de la palabra, réplica, contrarréplica, recontrarréplica. Todo se encontraba escrito en el guión de la sesión.
Quizá, una de las pocas cosas que se pueden resaltar es la relación de amor que ha nacido entre Partido Popular y Ciudadanos. O lo que es lo mismo, entre Mariano Rajoy y Albert Rivera. Love is in the air. Alabanzas, carantoñas, miradas y medias sonrisas que delatan una pasión conjunta por empezar a gobernar, y jabón, mucho jabón. Ambos han vuelto a ensalzar los beneficios del pacto alcanzado por los dos partidos, y todo lo demás, desaparece. Cualquier argumento choca de frente contra el poder que parece otorgar dicho pacto.
El debate en boca de los y las protagonistas
Pedro Sánchez, líder socialista, comenzaba su intervención con una declaración de intenciones rápida y concisa. “Señor candidato, seré claro y directo, el grupo parlamentario socialista votará en contra de su candidatura", ha asegurado Sánchez al principio de su intervención. Su único interés real, señor Rajoy, es tratar de mantenerse, usted, como sea, en la presidencia del Gobierno, y para esto, lo serio y lo real, es que usted no cuenta con los apoyos suficientes", afirmaba el socialista. Una intervención dura y contundente que no ha dejado lugar a la duda sobre las intenciones de voto. Poco más que añadir.
A las 10.40 horas, le ha llegado el turno al líder de Podemos, Pablo Iglesias. Sus palabras hacia Rajoy denotaban dureza. “Usted no es de la Pepa, ni de ninguna constitución, usted es más de carta otorgada, otorgada por la señora Merkel", le recordaba Iglesias al candidato popular. Y añadía, “usted es gallego, y hasta a usted le escandalizaron ciertas prácticas de su partido en Galicia, donde hoy gobierna el amigo de un narcotraficante”. Iglesias también se ha mostrado explícito en sus palabras hacia el líder de la formación naranja. "Señor Rivera, ha escrito usted casi su epitafio: 'Perdí la credibilidad, por Dios y por España'”, le espetaba el líder de la formación morada.
Xabier Domènech, portavoz de En Comú Podem, ha basado su discurso en resaltar los perjuicios que el gobierno del PP ha dejado en el Estado español después de cuatro años. También ha tenido palabras para Albert Rivera. “Roma no paga a traidores. Cuídese bien de con quien pactan ya que el Partido Popular ha batido todos los récords de corrupción”, le aconsejaba Domenèch.
El líder de IU, Alberto Garzón, ha sido el siguiente en intervenir. "Porque aspiramos a un país distinto, donde podamos pasar del reino de la necesidad al reino de la libertad", señalaba Garzón, "por eso, señor Rajoy, vamos a votar que no, y el próximo viernes, vamos a votar que no". El líder de IU apenas ha intervenido cinco minutos, pero le han servido para lanzar un mensaje de optimismo en referencia a la formación de una mayoría alternativa.
Alexandra Fernández, portavoz de En Marea, comenzaba su intervención indicándole a Rajoy cuál es el problema real. “El único miedo de la sociedad es que ustedes sigan gobernando. Para ustedes todo es una amenaza. Usted, señor Rajoy, encarna el desprecio todo el desprecio por la lengua y la cultura de la sociedad que le vio nacer”, aseveraba Fernández. Y para concluir, “ustedes se corrompieron por encima de nuestras posibilidades. Hoy estamos aquí para certificar la derrota en diferido del 20N que será, además, la derrota del PP en Galicia”, ha subrayado la portavoz de En Marea.
El líder de Ciudadanos ha subido a la tribuna a las 12.15 horas. El líder de Ciudadanos ha explicado, por no decir que ha hecho apología, de las bondades de su pacto con el PP. “Ciudadanos ha aprovechado el verano para trabajar, no como otros. Hemos demostrado que hay que buscar los puntos comunes y no los que nos separan. Hemos demostrado que el centro es la clave de la gobernabilidad. Hemos acordado 150 medidas con el PP, y de ellas, 100 estaban en el pacto con el PSOE", detallaba Rivera.
El portavoz de ERC, Joan Tardá, le recordaba a Rajoy el significado de las políticas del PP. “Ustedes son el lastre que nos impide avanzar. Tienen la voluntad de maltratar a la sociedad catalana, como lo demuestra el servicio ferroviario de Adif o la negación sistemática del expolio fiscal que sufrimos", explicaba Tardá. “Esta España derechona y nacionalista ha fracasado en Catalunya. Luego tiene que asumir que una mayoría de catalanes no se identifica con su manera de entender España”, le reprochaba el portavoz de ERC a Rajoy. “Además tienen que asumir que en el Parlament de Catalunya ya hay un gobierno independentista, por lo cual ambas instituciones se separan", concluía Tardá.
Aitor Esteban, diputado del PNV, se mostraba visiblemente molesto por no haber podido llevar acabo su intervención antes del receso de la sesión. Y así se lo ha hecho saber a la presidenta del Congreso español, Ana Pastor. Posteriormente ironizaba ante la Cámara sobre la posibilidad de formar una mayoría alternativa. “Lo que nos vamos a reír todos si recibimos la llamada socialista para formar un Gobierno alternativo”, aseguraba Esteban. “Según dijo usted aquí, solo hay una nación. Se lo voy a dejar claro porque es lo que pensamos los vascos: Euskadi es una nación, los vascos somos una nación, con una lengua propia que no tiene nada que ver con la española", sentenciaba el diputado del PNV.
Para incidir sobre el conflicto territorial ha subido a la tribuna el portavoz de Partit Demócrata Catalá (PDC), Francesc Homs. “Sin asumir la cuestión catalana no habrá Gobierno ni ahora ni después", vaticinaba Homs. “Catalunya es una nación, es un sujeto político y tiene capacidad para decidir libre y soberanamente su futuro”, advertía el portavoz del PDC. Además, Homs anunciaba una querella criminal que presentarán –su partido- este próximo jueves contra el ministerio del Interior, por las grabaciones de Fernández Díaz.
Marian Beitialarrangoitia, portavoz de Bildu, ha comenzado su intervención urgiendo al “desalojo del PP”. Y lamentaba que “la ciudadanía vasca”, y “la española”, tuviera que sufrir un “gobierno como el actual". Beitialarrangoitia también hizo referencia a las próximas elecciones en Euskadi. “Ahora nos toca jugar en casa, donde la afición es más entregada y donde nos muestra su apoyo con más fuerza”, manifestaba la portavoz de Bildu. Y en relación a la inhabilitación de Arnaldo Otegi, Beitialarrangoitia sostenía, “será nuestro candidato a lehendakari pese a quien pese".
