Las autoridades de ocupación marroquíes han impedido esta tarde rezar por el rapero saharaui Said Mohsen Lilli, fallecido en el naufragio de una patera frente a las costas de Dajla, en el Sáhara Occidental, en el que perdieron la vida 22 personas.
Un grupo de saharauis se encontraba reunido esta tarde en una mezquita de El Aaiún, frente a la sede de la MINURSO -Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental-, cuando elementos paramilitares armados con palos han irrumpido en el patio e impedido el rezo y el funeral por Said Mohsen Lilli, el rapero saharaui fallecido la semana pasada en el naufragio de una patera que se dirigía a las islas Canarias con 38 personas, entre subsaharianos, saharauis y marroquíes.
Said Lilli era un artista y activista conocido por su lucha por la autodeterminación, comprometido con los sufrimientos del pueblo saharaui y la resistencia a la ocupación marroquí. Policías de uniforme y de paisano y fuerzas auxiliares se han concentrado junto a la sede de la MINURSO, para evitar manifestaciones saharauis pacíficas durante el funeral por Said.
Ante la actuación de las fuerzas paramilitares y policiales, la familia del rapero saharaui se ha visto obligada a cambiar el lugar de oración y se han dirigido a la mezquita Dweirat.
El corresponsal de Equipe Media informa que los paramilitares, dirigidos por Ali Boufri y Mohsen Serguin y que actúan habitualmente contra la población saharaui, además de impedir el rezo en el patio de la mezquita han perseguido a los que se dirigían a Daura, a 40 km al norte de El Aaiun, para asistir al entierro en el cementerio.
El cuerpo de Said ha sido enterrado con la bandera saharaui, en reconocimiento a su activismo a través de arte por la libertad del Sahara Occidental. La población saharaui presente en el entierro ha ondeado banderas de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), ha coreado consignas contra la ocupación y los crímenes marroquíes.
