Las movilizaciones convocadas por el sindicato OSTA se han llevado a cabo en Zaragoza y Uesca, bajo el lema “Por la vía aragonesa. En Aragón podemos vivir mejor”, en las que el sindicato ha mostrado su rechazo a la situación actual que vive el país, "fruto del aumento del coste de la vida que se lleva produciendo en los últimos meses y así como el rechazo a las políticas que están empobreciendo con dureza a las familias".
Por ello, desde el sindicato, y a través de lo que denominan “Vía Aragonesa”, han exigido una batería de medidas para mejorar las condiciones de vida de las clases populares de Aragón, desde el aumento a 1.200 euros mes del Salario Mínimo Interprofesional o de las pensiones más bajas, así como la implementación de medidas como una tarifa energética aragonesa, una banca pública o una cesta de alimentos antiinflacción.
En lo laboral ven "imprescindible" que "nuestros convenios se negocien aquí", ya que "la recentralización de la negociación colectiva por parte de los sindicatos estatales solo trae convenios de miseria". Asimismo exigen a la patronal que los convenios vayan ligados al IPC, "puesto que mientras suben los precios, la clase trabajadora pierde poder adquisitivo", a la vez que reclaman que no haya ningún convenio por debajo de los 16.800 euros anuales y seguir aumentando el SMI hasta los 1.200 euros en 14 pagas, que es aproximadamente el 60% del salario medio en Aragón, tal y como recomienda la carta social europea.
También quieren denunciar que la próxima reforma de las pensiones "solo va a traer más precariedad a nuestro mayores", ya que "ampliar el cálculo, solo tiene como objetivo la reducción de las mismas", por lo que "ante este nuevo ataque a nuestro sistema público de pensiones, debemos combatirlo con movilización y rechazando frontalmente la implantación de planes complementarios de pensiones, que entendemos es el primer paso para la privatización del sistema de pensiones".
Para OSTA, "es necesario la derogación de las reformas de 2011 y 2013 que supusieron alargar la jubilación a los 67 años y que la pensión mínima se sitúe en los 1.200 euros en 14 pagas, como garantía a que nuestros mayores tengan una jubilación digna".

Según señala David Lázaro, Secretario General de la central aragonesista, el Ejecutivo aragonés "debe ponerse a trabajar intensamente en sacar Aragón de esta situación económica, impulsando políticas de empleo, energéticas y sociales que beneficien a las clases populares aragonesas". La crisis sanitaria "ha puesto sobre el papel, la necesidad de industrializar el país y no depender de unas pocas multinacionales y del sector servicios. Y para ello es necesaria la aplicación de políticas redistributivas a través de reformas fiscales en Aragón, como son la creación de una Hacienda Foral aragonesa o el aumento del impuesto de Sociedades al 25%, entre otras cuestiones", añade Lázaro.
En otro orden de cosas, según ha señalado Serchio Tella, integrante de la Ejecutiva, desde la concentración de Uesca, "estamos cansados del llamado diálogo social, que solo ha supuesto la desmovilización de la clase trabajadora, sumado a que el Gobierno más 'progresista' de la democracia debe tomar decisiones que beneficien a las mayorías sociales, como es el caso del precio de la luz, mas oportunidades de vivienda para la clase trabajadora del Pirineo o la defensa de nuestros paisajes, como puede ser Canal Roya".
Alberto Navarro, integrante de la Ejecutiva, también ha querido poner el foco en denunciar la "alarmante situación" de pobreza energética que viven muchos hogares en Aragón, remarcando algunas de las propuestas en materia energética del sindicato, que pasan por "la creación de una empresa pública aragonesa de energía, donde se incluyan la gestión de las centrales hidroeléctricas, una tarifa eléctrica aragonesa, debido a nuestro carácter productor y exportador de nuestro país, puesto que este es el 'nuevo trasvase', el energético, del que no quieren ni oír hablar en Madrid, como la puesta decidida por las instalaciones de auto consumo".
Por último, desde el sindicato OSTA señalan que esta no va a ser la última movilización que realicen, sino que en su agenda está aumentar la movilización en las calles con el fin de "evitar la agenda de recortes sociales que se prevé para este otoño" y los cuales "agravan todavía más la situación social y económica que parecen miles de familias en nuestro país".