En su intervención, Sanz ha puesto de manifiesto que el hecho de que una generadora energética venda energía a las empresas que se instalen en Aragón pervierte el concepto de autoconsumo y critica que se apruebe por una vía rápida cuando necesita análisis y planificación. Además, la normativa no contempla el tributo ambiental a los mega parques que para Izquierda Unida era clave en su propuesta fiscal.
Este decreto ley no responde para IU Aragóm a las expectativas puestas durante años en cuanto a la planificación y ordenación de las renovables en Aragón. Después de tres años escuchando a colectivos pedir precaución con la implantación de las renovables y planificarla, de pedir otro modelo para el despliegue de las energías renovables por el territorio, de un sinfín de iniciativas presentadas en el parlamento, que han sido aprobadas, el cuatripartito usa la vía del decreto ley, la urgente, para convalidarlo unos días antes de que se disuelvan las Cortes de Aragón y no haya tiempo para debatirla y que se cumplan los acuerdos de la cámara.
El gobierno insiste en elaborar una “directriz” del paisaje, pero lo que acordó la cámara es la aprobación de una ley, cuyo objeto es el reconocimiento jurídico, la protección, gestión y ordenación del paisaje de Aragón.
“Ahora reconocen que la comunidad tiene capacidades sobre la planificación, pero previamente se declararon incompetentes. Han esperado lo suficiente para que cuele todo lo que tenía que colar, sin control ni regulación. Este es un decreto complejísimo técnica y jurídicamente, muy extenso, en el que se han incluido medidas interesantes y positivas, pero se aprovecha para colar trampas y se elabora sin participación”, critican desde IU.
Oportunismo electoral
Así valoran desde IU Aragón la actitud del Gobierno aragonés: “Se han hecho muchas fotos y anuncios, pero los grupos de protección del paisaje y de conservación de la naturaleza no han sido convocados a los foros, y pretenden legislar con un Decreto Ley con urgencia preelectoral”.
A la participación de los grupos políticos se les quita la posibilidad de tramitarlo como proyecto de ley y poder hacer aportaciones. Igual que no ha llegado en cuatro años la ley de cambio climático de Aragón, que la presentó en prensa Marta de Santos, hasta ese mismo día directora general de Cambio Climático, y que debería incluir algunos de los aspectos que afectan a la gestión energética.
Un decreto que no delimita dimensiones, ni en tamaño de parques, ni distancias, ni volúmenes; más pensado para que las sociedades mercantiles accedan a los beneficios que se otorgan a este tipo de comunidades y del autoconsumo. “Un paso más de la política de la alfombra roja del cuatripartito para los de siempre. No define modelo local o social, y supone un acelerador para el descontrol de las renovables, elaborado bajo el paradigma de la competitividad y no el de la cooperación”, añaden desde el partido.
Como explican, abre la puerta a las comercializadoras al uso, pero dentro de Aragón, y no establece cotas a la repotenciación y a la hibridación. Se modifica la ley para flexibilizar (a mayores) el margen de las autorizaciones a proyectos eólicos.
El decreto y la urgencia van encaminados a la compensación económica, a abaratar el precio de la luz (dicen que a la lucha contra la despoblación, favoreciendo la inversión) pero no dicen nada de favorecer otro modelo de mercado o de reducir los impactos ambientales y territoriales.
“En materia de ordenación del territorio también nos genera muchas dudas porque no cuenta con un plazo máximo de caducidad de las declaraciones de prioridad, da beneficios de la expropiación a más iniciativas particulares y desprotege los suelos, obviando la voluntad del planificador urbanístico”, concluyen desde IU Aragón.
