El 15 de enero, la empresa suiza Schindler asestó un duro golpe al tejido industrial aragonés al anunciar el despido de 119 trabajadores y trabajadoras de la planta que la compañía tiene en el polígono Empreasarium de Zaragoza. "Es el cierre de una empresa con 75 años de historia, no sólo la desaparición de los 119 puestos de trabajo, también el varapalo a todas las empresas auxiliares y el tejido productivo de Aragón", denunciaba este lunes el presidente del comité de empresa, José Antonio Dieste.
"Lucharemos para que no sea un cierre total, que se mantenga una ventana en las líneas de producción para poder revertir este proceso y salvar puestos de trabajo", afirmó Dieste, antes de asistir a la primera reunión con la empresa en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA). Sin embargo, Schindler sigue empeñada en el cierre de la planta zaragozana, una actitud que lleva al comité ha mantener los paros parciales de media jornada para este miércoles y jueves, y totales los días 19 y 20 de febrero.
Además, este lunes por la tarde, en plaza España de la capital aragonesa, las y los trabajadores de Schindler, arropados por más de 300 personas, se concentraron por primera vez para protestar contra los despidos y en defensa del tejido industrial aragonés. "No vamos a perder la esperanza hasta que finalice la negociación", señaló Dieste. Cabe recordar, que el día 21 de este mes es el plazo máximo que han fijado, empresa y comité, para llegar a un acuerdo.
La protesta de la plantilla de Schindler volverá a las calles de Zaragoza este miércoles y jueves, día de los paros parciales, con sendas concentraciones en plaza España. Para el miércoles 19, primer día de huelga total en la planta, convocarán una manifestación. Y es que, "parar es la única arma que nos queda a los trabajadores", recordaba el presidente del comité.
Este lunes, el coordinador de IU Aragón, Álvaro Sanz, y la eurodiputada Sira Rego mantuvieron un encuentro con el comité de empresa de Schindler. Izquierda Unida defiende la armonización fiscal entre países de la UE para garantizar condiciones laborales dignas en todos los Estados europeos y ha hecho un llamamiento a frenar la deslocalización. En este sentido, Rego denunció que el dumping o ERE de Schindler es fruto de la reforma laboral del PP.
Por su parte, CHA interpeló, el pasado 29 de enero, a la ministra de Industria española "por el problema generado por la deslocalización de Schindler" y preguntaba "si el Gobierno de España tiene previsto implicarse para evitar la fuerte pérdida de empleos que se va a generar en Zaragoza". Y Puyalón de Cuchas reclamó el control de I+D y la inversión pública en empresas aragonesas para evitar más deslocalizaciones como la de Schindler.
