Desde la Mesa Aragonesa de Salud (MAS) han convocado una concentración delante del IASS en plaza del Pilar a las 13:¡.00 horas, en defensa de las residencias públicas de Aragón. Las organizaciones que forman parte de esta Mesa van a presentar a la Administración, ese mismo día, una serie de reivindicaciones para mejorar el estado actual de los Centros Residenciales de personas Mayores en Aragón.
MAS exigen responsabilidades por el elevado número de muertes ocurridas en las Residencias de personas mayores, “una situación que no debe repetirse”.
“El modelo residencial mayoritariamente privado que negocia con la salud de los residentes ha obviado sus derechos a una atención digna y de calidad y ha maltratado a sus trabajadoras/es”, señalan desde la organización.
Por todo esto, anuncian una serie de movilizaciones que comenzarán este día 19 de abril, para exigir residencias 100% públicas, con un modelo de asistencia que sea respetuoso con el derecho a una vida digna de los residentes y condiciones de trabajo justas para su personal.
La Mesa está formada por ADSPA, CGT Sanidad, Foro Ppresidentes C. S. Z., FABZ, PSM, Plataforma contra la privatización de la sanidad, CAVAragón.
Entregarán un manifiesto al IASS con sus exigencias
En el escrito constan nueve puntos fundamentales que MAS exige que se cumplan.
Para empezar, eliminar el modelo residencial despersonalizado e instaurar nuevos modelos de atención. Creen que es necesario avanzar hacia un modelo que ponga la vida en el centro, con una perspectiva de género, acabando con la precarización y feminización de los cuidados.
También piensa que es fundamental una búsqueda activa de soluciones alternativas a las residencias, más creativas, respetuosas, que permitan envejecer en los propios domicilios y en el propio entorno lo máximo posible.
Respecto al final de la vida, exigen abandonar la cosificación de las personas mayores sin escuchar sus deseos y opiniones y contar solamente con la de sus familiares. Evitar el encarnizamiento terapéutico, información clara sobre el Testamento Vital a familiares y mayores, así como la creación de un Observatorio de la muerte digna.
Por otra parte, también entienden como esencial un adecuado afrontamiento de la pandemia, ya que el aislamiento social y la prohibición de las visitas, acelera el deterioro de las personas residentes y supone un abuso, un maltrato y una negación de los derechos humanos.
Por todo esto, reivindican soluciones adecuadas y urgentes por parte de la administración pública. Exigen un modelo sociosanitario 100% universal y de calidad con una coordinación eficiente entre el SALUD, los Servicios Sociales y Salud Pública. Todas las nuevas residencias que se abran deberán de ser de titularidad y gestión pública, a fin de garantizar unos indicadores similares a los países de la Unión Europea.
A la Dirección General de Salud Pública le piden más intervenciones, asesoramiento a las residencias y establecer un modelo de vigilancia (screening periódicos …) y elaboración de planes de contingencia.
Así mismo, también señalan la importancia de una coordinación adecuada con el sistema sanitario. “Los centros residenciales deberán de estar directamente asignados a unidades sanitarias concretas, Equipos de Atención Primaria debidamente especializadas y con medios y personal suficientes”, afirman.
El personal deberá contar con la formación adecuada y con condiciones laborales dignas. Por último, la comunidad de cuidados con participación de residentes, familiares y personal de los centros, para garantizar los derechos de los usuarios contemplados en el Decreto 111/1992.