La memoria de Gladys del Estal, "asesinada por defender el Sol, el Agua y la Libertad", sigue muy viva

Se cumplen 43 años del asesinato de la activista ecologista a manos de un guardia civil. Medio centenar de personas participaron este viernes en Tutera en el homenaje anual. "Su lucha estaba llena de sentido entonces, y también lo sigue teniendo ahora", recuerda Bardenas Libres.

Homenaje a Gladys en Tutera, en el 43 aniversario de su asesinato. Foto: Bardenas Libres

43 años después de su asesinato, la memoria de Gladys del Estal Ferreño sigue muy viva. Este viernes, 3 de junio, aniversario de su muerte, medio centenar de personas participaron en Tutera en el homenaje anual en el lugar donde fue asesinada. Convocadas por el colectivo Bardenas Libres, desde allí, también denunciaron, en un comunicado, "la violencia y la impunidad con la que actuó la Guardia Civil y el resto de los poderes del Estado español".

"Se cumplen 43 años del asesinato de Gladys, asesinada por defender el Sol, el Agua y la Libertad", recordaron en el manifiesto. Gladys tenía 23 años cuando la mataron, vivía en el barrio de Egia de Donostia, y era programadora informática. Pertenecía al Grupo Ecologista de Egia y a los Comités antinucleares de Euskal Herria. Aquel 3 de junio participaba en la Jornada Internacional contra la Energía Nuclear que se celebraba en Tutera.

"Miles de personas se manifestaban contra el Plan Energético Nacional, solicitando la paralización de la central de Lemoiz y de los restantes proyectos nucleares, incluido el que se planeaba realizar en Tutera. Además, la movilización tenía también un carácter antimilitarista ya que se protestaba también contra el polígono de tiro de Bardenas", añade el comunicado.

Tras el asesinato de Gladys, se convocaron protestas y varios días de huelga general en Euskal Herria. El Ayuntamiento de Tutera acordó sendos pronunciamientos unánimes de sus 21 ediles, que demandaban la dimisión del ministro del Interior, el Gobernador civil y mandos responsables; la retirada de la policía y la disolución de los cuerpos represivos; la recuperación para Nafarroa de las tierras del polígono de tiro de Bardenas y la paralización de todas las centrales nucleares.

Dos años después, en 1981, el guardia civil José Martínez Salas, asesino de Gladys fue juzgado en la Audiencia de Iruñea "en un proceso lleno de irregularidades y condenado a 18 meses de prisión como 'autor responsable de un delito de imprudencia temeraria con resultado de muerte". No pisó la cárcel y dos meses y medio después, fue condecorado por el gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo con la Cruz del Mérito de la Guardia Civil. "Por si fuera poco, en 1992 fue premiado de nuevo, y bajo el gobierno de Felipe González recibió la Cruz del Mérito Militar, el mismo gobierno del PSOE que entonces comenzaba la privatización de las compañías públicas del sector energético", denuncia Bardenas Libres.

"La muerte de Gladys no fue en vano, su lucha y la de otras muchas tenía sentido, y en la actualidad no hay central nuclear en Lemoiz, ni central nuclear en Tutera", destaca Bardenas Libres. Sin embargo, "el actual modelo económico y energético sigue poniendo en peligro la vida. Asistimos a un plan de transición energética, donde los recursos fósiles están siendo sustituidos por renovables, en un contexto económico donde no se cuestiona el desarrollismo ilimitado, la acumulación de los recursos en pocas manos, la deshumanización, la exclusión social y económica  de millones de personas ante el capitalismo salvaje, que actualmente recurre al fascismo, a la biotecnología, a las guerras, al miedo… Para seguir alimentando las grandes fortunas de los más ricos del planeta".

Para el colectivo antimilitarista, "las guerras que se entrenan aquí en Bardenas son un claro ejemplo de ello". "También en estas tierras se proyectan instalar miles de aerogeneradores y de placas solares que ponen en peligro nuestros hábitats y pueblos, con el único interés de generar altos beneficios para las grandes empresas en un mercado privatizado, donde los recursos básicos han sido convertidos en negocio, y donde se evidencia lo poco que les importa la vida a aquellos que nos imponen sus oscuros planes", continúa el comunicado.

Por último, Bardenas Libres subrayó en el acto que la lucha de Gladys "estaba llena de sentido entonces, y también lo sigue teniendo ahora". "Desde aquí nuestro sentido homenaje y reconocimiento a Gladys del Estal Ferreño, nos queda la memoria, y la valiosa senda que ella y otras muchas nos han legado", concluyeron al grito de "Gladys gogoan zaitugu!".

Los actos contra el polígono de tiro de Bardenas continuarán este domingo. La Plataforma No a las Guerras de Exeya y Pueblos ha convocado una concentración en la capital de las Cinco Villas en sustitución a la tradicional marcha antimilitarista contra la instalación militar, que se ha celebrado durante más de 30 años antes de la llegada de la pandemia.

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