Wembley ha vivido este domingo una final de la Eurocopa 2022 de fútbol femenino disputada entre Inglaterra y Alemania de alta tensión, mucho en juego y muchos nervios que impidieron durante muchos minutos ver el gran potencial de ambos equipos durante el torneo.
Toone adelantó a las locales en el minuto 62' pero Magull empató en el 79', llegando la final a la prórroga. Ahí, en el minuto 110', la delantera del Manchester City Chloe Kelly fue la heroína de Inglaterra, con el gol que dio el título a su selección, el primero continental tanto femenino, en su tercera final, como masculino, y además en casa. Ni un segundo tardó en sonar el 'football's coming home' en Wembley para celebrar la victoria de las anfitrionas.
Inglaterra partía con mucha motivación y una ventaja, las cerca de 90.000 gargantas animando en las gradas, y con la confianza de 19 partidos invicta, incluido un triunfo sobre las alemanas en febrero. Al mando de la selección, liderada por Beth Mead con seis goles y cinco asistencias en el torneo, estaba la mejor entrenadora del mundo en la actualidad, la neerlandesa Sarina Wiegman, que llevó a Países Bajos al título continental en 2017 y a la final del pasado Mundial.
Alemania tenía la historia de su parte -la más laureada- pero comenzó el partido con una mala noticia, la ausencia de su goleadora Alexandra Popp que se lesionó en el calentamiento previo a la final. Popp, que volvió en marzo después de una lesión de rodilla de 10 meses, estaba siendo la mejor jugadora de su equipo, con seis goles repartidos en los últimos cinco partidos. La delantera del Wolfsburgo, que también sufrió el infortunio de las lesiones perdiéndose las dos Eurocopas anteriores, volvió a padecer ese cruel destino en la final en Londres.
Así las cosas, la anfitriona ha hecho historia en su casa con una fase de grupos perfecta, con 14 goles a favor y ninguno en contra. Solo la selección española puso contra la cuerdas a las inglesas en cuartos de final que estuvieron a siete minutos de quedarse fuera del título, aunque finalmente salvaron en la prórroga su peor momento en el torneo (2-1). Luego llegaría la goleada (4-0) a Suecia para llegar fácil a su tercera final.
Alemania, que igualmente solo había encajado un gol en el torneo hasta la final dónde aspiraba a su noveno título, también supo sufrir en los cruces, ante Austria (2-0) y Francia (2-1). El rigor táctico, el esfuerzo colectivo que lidera Oberdorf y la pegada de Alexandra Popp han sido las bazas del equipo que dirige Martina Voss-Tecklenburg, quien fue cuatro veces campeona como jugadora.
Récord de asistencia
La final entre Inglaterra y Alemania también ha marcado un nuevo récord de asistencia de todos los tiempos para un partido de la fase final de una Eurocopa, tanto femenina como masculina, con 87.192 personas en Wembley. El anterior récord de asistencia se estableció en la final masculina de 1964 entre España y la Unión Soviética, que se jugó ante 79.115 personas en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid.
Una Eurocopa de fútbol que cierra con gran sabor de boca y con otro récord batido, el general de asistencia al torneo de 240.055 establecido en la Eurocopa 2017 en los Países Bajos ahora se ha duplicado.
FICHA DEL PARTIDO:
Inglaterra: Earps; Bronze, Bright, Williamson, Daly (Greenwood, min.88); Stanway (Jill Scott, min.88), Walsh; Mead (Chloe Kelly, min.63), Kirby (Toone, min.56), Hemp (Parris, min.120); y White (Russo, min.56).
Alemania: Frohms; Gwinn, Hendrich, Hegering (Doorsoun, min.103), Rauch (Lattwein, min.103); Oberdorf, Magull (Dallmann, min.91), Dabritz (Lohmann, min.73); Huth, Schuller (Anyomi, min.67) y Brand (Wassmuth, min.46).
Árbitra: Kateryna Monzul (Ucrania). Amarillas a Stanway (23’), White (24’); Rauch (41’), Oberdorf (57’), Schuller (58’).
Goles: 1-0, min.62: Toone. 1-1, min.79: Magull. 2-1, min.110: Chloe Kelly.
