El secretario de Estado de Medio Ambiente constata una reducción del agua disponible

Hugo Morán ha inaugurado el XII Congreso Ibérico de Gestión y Planificación del Agua, organizado por la Fundación Nueva Cultura del Agua en la Universidad de Murcia.

De izquierda a derecha: Santiago Álvarez, Hugo Moran, Alfonsa García, Joan Corominas | Foto: FNCA

El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha constatado una reducción de los recursos hídricos disponibles en los territorios del Estado español, en la inauguración del XII Congreso Ibérico de Gestión y Planificación del Agua que se celebra en la Universidad de Murcia hasta el 28 de febrero y está organizado por la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA).

En concreto, Morán ha mencionado que los nuevos planes hidrológicos recogen reducciones en las asignaciones de recursos a los distintos usos para las diferentes demarcaciones intercomunitarias. "Supone pasar de los 28.000 hectómetros cúbicos al año que figuraban en los planes de segundo ciclo a los 26.300 hectómetros cúbicos al año recogidos en los planes de tercer ciclo", ha recalcado el alto cargo del Ministerio español para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. para añadir: "Debemos modificar nuestra forma de relacionarnos con el agua".

Morán ha aplaudido la apuesta de la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA) por elegir Murcia como sede de la duodécima edición de este Congreso y por la materia de debate, las aguas de transición y costeras. "Dar al mar no es el morir, es completar el ciclo", ha dicho. El secretario de Estado ha reconocido asimismo la labor de la Fundación Nueva Cultura del Agua por "su compromiso en la estructura de cooperación que necesita este país" y ha alabado el "alto nivel de conocimiento" de las personas participantes en las jornadas.

Según ha informado la FNCA en una nota de prensa, la participación de Hugo Morán en el Congreso "ha despertado mucho interés mediático tras la aprobación de los caudales ecológicos, como exige la Directiva Marco del Agua, para el río Tajo, lo que se traducirá en una menor cantidad de agua para el trasvase Tajo-Segura en los próximos años". Según Morán, "el impacto en la disponibilidad de agua no depende de los caudales ecológicos que tenga establecidos cada cuenca, sino de la evolución del clima y de la meteorología".

Ante las preguntas de los medios, Morán ha asegurado que "todas las cuencas hidrográficas están en igualdad de condiciones", al incorporar "un criterio de normalidad en la regulación de la totalidad de las cuencas hidrográficas". Por ello, afirma que el Ebro, el Guadalquivir, el Segura, el Tajo o el Guadiana "disponen de unos mecanismos de gestión razonablemente equiparables, por lo que la ciudadanía puede estar segura de que no hay diferencia de tratamiento en función de que residan en un territorio u otro".

Diferentes voces

En la inauguración del Congreso también ha participado Joan Corominas, vicepresidente de la Fundación Nueva Cultura del Agua, quien ha destacado el "carácter ibérico" de la cita. "Queremos que todos los interesados en la gestión trabajemos juntos en resolver los problemas de los ríos que nos comunican", ha subrayado.

Santiago Álvarez Carreño, presidente el comité organizador, ha incidido en la importancia de que Murcia tenga diferentes voces "en un tema tan complicado como el agua". Mientras que Alfonsa García Ayala, vicerrectora de Coordinación y Calidad de la Universidad de Murcia, sede del congreso, ha hecho de anfitriona.

Además de las decenas de personas participantes en el Congreso, llegadas de diferentes puntos de la península e incluso de otros países como Chile, entre el público participante en el acto de inauguración estaba el relator especial sobre el derecho humano al agua y al saneamiento de Naciones Unidas y uno de los impulsores de la Fundación Nueva Cultura del Agua, Pedro Arrojo.

La Fundación Nueva Cultura del Agua, que organiza estos congresos cada dos años, está formada por personas profesionales procedentes de diferentes ámbitos (académico, empresarial, cultural, social…) de la Península Ibérica, que promueven un cambio en la política de gestión de aguas para "conseguir actuaciones más racionales y sostenibles". Trabaja para recuperar los ecosistemas acuáticos (fuentes, ríos, riberas, lagos, humedales…), que "son la máxima expresión de la vida en el planeta" y defiende "la recuperación del valor patrimonial, cultural, emocional, estético y lúdico de los ríos ibéricos, en una sociedad que ha confundido progreso con negocio".

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