El Pleno ordinario del Ayuntamiento de Alcanyiz aprobó, con los votos en contra de PP y PAR, la adhesión a un convenio con Amical de Mauthausen, asociación de prestigio internacional que defiende los derechos morales y materiales, la dignidad y memoria de las personas represaliadas en los campos de exterminio nazis.
Durante el debate, el portavoz del PP, Ignacio Carbó, menospreció la memoria de 17 alcañizanos asesinados en Mauthausen. Como respuesta a sus declaraciones IU Alcañiz ha querido puntualizar su argumentación.
Carta integra de la Asamblea de IU Alcañiz al concejal, consejero comarcal, y portavoz del PP, Ignacio Carbó Espinosa:
El pasado martes 13 de diciembre, en el Pleno ordinario del Ayuntamiento de Alcañiz, había un punto del orden del día donde se proponía la adhesión a un convenio con Amical de Mauthausen, se trata de una asociación fundada en 1962 por antiguos deportados a este campo de concentración nazi, y que tiene como objetivo defender los derechos morales y materiales de los aproximadamente 10.000 españoles deportados a los campos de concentración del Tercer Reich y de sus familiares, estrechar lazos de solidaridad entre ellos y preservar su memoria. Al campo austríaco de Mauthausen fueron deportados y allí asesinados 17 alcañizanos.
Durante el debate de este punto en el Pleno (donde tanto PP como PAR votaron en contra), el Sr. Carbó realizó una serie de afirmaciones y valoraciones a las que deseamos responder desde la Asamblea de IU-Alcañiz.
1º Se refiere a la asociación Amical de Mauthausen como “una asociación que ni nos va, ni nos viene”. Una frase especialmente lamentable, más cuando estamos hablando de que 17 alcañizanos perdieron la vida en este campo de concentración y que esta asociación busca dignificar y poner en valor su memoria. Pensamos que esta desafortunada frase del Sr. Carbó lo ubica en una posición política a años luz de la concordia y la reconciliación que tanto les gusta predicar.
2º Votaciones como la del otro día por parte del PP, contra la Amical de Mauthausen, y por tanto contra la dignificación de los españoles que murieron en los campos nazis, suponemos que es consecuencia inevitable de ser los herederos políticos de un régimen, el franquista, que no solo era golpista y dictatorial, sino el aliado de los regímenes nazi y fascista, que realizaron bombardeos como el de Alcañiz o Guernica.
Entendemos que por todo esto les será imposible reparar la memoria de las víctimas españolas de los campos de concentración nazis, al ser herederos políticos de quienes fueron aliados de los criminales que llevaron a las cámaras de gas a millones de personas, entre ellas 17 alcañizanas en Mauthausen.
Y no decimos esto de manera infundada, ya que el PP es el resultado de la refundación de Alianza Popular (AP), partido creado por políticos franquistas que rechazaron en su momento la reforma del régimen tal como se desarrolló en la transición; y la mitad del grupo parlamentario de AP no apoyó la Constitución de 1978 y todos ellos votaron en contra del Título VIII que desarrolla la Organización Territorial del Estado.
3º En gran parte de su argumentación se empeña en igualar y equilibrar a los dos bandos de la Guerra Civil española como igual de malos: es lo que se denominó en Argentina como la “teoría de los dos demonios”, en donde las dos partes son igual de culpables y sus actos igual de terribles; actualmente en Argentina ya nadie defiende esas tesis y el país ha asumido que hubo unos verdugos y unas víctimas, unos golpistas asesinos y unos demócratas asesinados. Sin embargo, en España la postura equidistante de “todos fueron malos” sigue teniendo fuerza gracias al poso ideológico y cultural que provocaron las cuatro décadas de dictadura.
Pero no, Sr. Carbó, no, los dos bandos no fueron iguales, por mucho que a usted le moleste. Hubo un bando rebelde que dio un golpe de Estado y que, al fracasar en muchos territorios, provocó una lenta y cruenta guerra civil que el bando golpista sólo ganó gracias a la ayuda de la Alemania nazi de Hitler y a la Italia fascista de Mussolini. Después de ganar la guerra, el bando franquista no buscó la reconciliación, sino la represión y la venganza más cainita, que provocó miles de muertos en las cárceles y en los pelotones de fusilamiento. Durante 40 años las víctimas provocadas por el bando republicano (que por supuesto las hubo) tuvieron su justicia y reparación en forma de homenajes, nombres de calles e inscripciones en monumentos, mientras las víctimas del bando republicano se pudrían en cunetas o se exiliaban fuera de España, y sus bienes eran saqueados e incautados. Y ahora, después casi de 100 años siguen siendo ustedes igual de inmisericordes, intentando bloquear la dignificación de la memoria de aquellas personas que fueron represaliadas y asesinadas por el fascismo en todas sus versiones, ya sea franquista o nazi.
4º Sigue usted falseando la Historia, utilizando el viejo y rancio argumento de la ingobernabilidad de la República y la inevitabilidad del golpe de Estado. Se refiere a la República como “aquellos años oscuros” y que “no era una época dulce ni que augurara un futuro prometedor para España”. Le queremos responder que la República fue la primera experiencia verdaderamente democrática que tuvo este país en su historia, y que los sectores oligárgicos (terratenientes, grandes industriales, iglesia y ejército) no pudieron soportar, generando un ambiente de crisis e inestabilidad que propiciara la vuelta al orden “de toda la vida”. La mayoría del pueblo español votó en febrero de 1936 por seguir profundizando en la democratización y en la justicia social para hacer avanzar al país, aspecto que no pudieron soportar las élites económicas y sociales y propiciaron un golpe de Estado con las sabidas consecuencias para todos. Esta es la verdad de su “odiada” República. Un sistema democrático, con todos sus errores, pero democrático, que fue derrocado por la fuerza de las armas, no de la razón.
5º Dice usted cosas que no son verdad (no sabemos si por ignorancia o por su interés político) cuando afirma que el Partido Comunista es ilegal en Alemania. Hemos de decirle que esto es falso y que durante años, ya con la Alemania reunificada, los “viejos comunistas” seguían ganando las elecciones en el Berlín oriental. Y con respecto a su obsesión con el Partido Comunista de España, le recordamos que es un partido legal desde el 9 de abril de 1977, aunque actualmente no se presenta a las elecciones porque está integrado en IU. La historia del PCE, es la historia de la dignidad y la lucha contra el franquismo. Mientras todos los partidos estaban desaparecidos en la oscuridad que este país tuvo que vivir durante los 40 años de dictadura, el PCE seguía con su lucha clandestina para pelear por la democracia, la justicia social y los derechos laborales. Mientras España era un páramo político, el PCE mantuvo la llama de la esperanza y forzó junto el pueblo español un sistema democrático durante la transición que jamás se hubiera alcanzado sin la fuerza de las mujeres y hombres del PCE. Esta es la realidad del comunismo en España por mucho que le pese, Sr. Carbó.
6º Saca a la luz la resolución del Parlamento Europeo del 19 de septiembre de 2019 en donde “condena los crímenes cometidos por los regímenes nazi y comunista a lo largo del siglo XX e insta a los Estados miembros a hacer frente a las organizaciones que difunden discursos de incitación al odio y a la violencia”. Y en donde vuelve a repetir el mantra de los 100 millones de muertos que ha producido el comunismo durante su historia. Iremos por partes Sr. Carbó.
En primer lugar queremos poner en valor el impulso de la URSS para vencer al nazismo durante la II Guerra Mundial. Que nadie se engañe, si no hubiera sido por la valentía, fuerza y sacrificio del pueblo ruso y el Ejército Rojo, los aliados no hubieran ganado la guerra. Seguido a esto y como dijo Julio Anguita: “con todos los horrores y los errores, el pueblo ruso comió por primera vez con los comunistas”. Y repetimos nosotros en primera persona, con todos los horrores y los errores que hayan podido cometer algunos en nombre del comunismo, nuestra asamblea no renuncia a los valores ni a los principios del comunismo entendido como lucha por la igualdad, la justicia social, los servicios públicos, los derechos sociales y laborales, el feminismo, el laicismo, el internacionalismo y la solidaridad entre los pueblos.
En segundo lugar, no vamos a entrar en la justificación de crímenes totalmente repudiables de sistemas totalitarios, pero le animamos a leer la abundante bibliografía que pone en duda y solfa el mantra de los 100 millones de muertes a cargo del comunismo.
7º Para finalizar, Sr. Carbó, nosotros sí votamos a favor de apoyar a Amical de Mauthausen, como también hubiéramos apoyado cualquier iniciativa que hubiera apoyado a víctimas de cualquier signo y color. Esa es la diferencia entre ustedes y nosotros.