Desde la Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases (COAGRET) muestran a través de un comunicado su "preocupación" por las informaciones que sitúan a la Comisión Permanente de la Comisión del Agua en Aragón como el órgano en el que tendría lugar la 'Mesa del diálogo del agua en Aragón'. Dicen entender que la reunión que tendrá lugar el día 22 de junio, según se ha anunciado, "no debe tener otra finalidad que convocar el plenario de la Comisión del Agua, que es el órgano en el que estamos representados los afectados por obras hidráulicas, al igual que el resto de colectivos". Consideran que de no ser así, el Gobierno de Aragón "estaría provocando que la mesa de diálogo comenzara viciada gravemente".
Por otro lado, sobre la mesa del diálogo, aseguran que si se quiere que "esta iniciativa tenga visos de producir algún resultado positivo, se debería incluir en ella también a expertos que sitúen sobre la mesa la necesidad de tener en cuenta otro modelo de gestión del agua centrado en la gestión de la demanda, que cambie el paradigma actual". A su entender, personas expertas "cuya acreditación vaya más allá del carnet de un partido determinado y que puedan aportar una visión técnica amplia y actual que permita avanzar y resolver los conflictos enquistados".
Recuerdan que "si el verdadero objetivo" de esta mesa es el de crear un nuevo Pacto del Agua en Aragón, "de cara a superar los conflictos y asegurar que sea de todos y todas las aragonesas, la mesa debe abordar específicamente obras que se encuentren judicializadas" como el recrecimiento de Yesa, los embalses de Mularroya y Almudévar, o la situación del Guadalope. "Toda vez que la sentencia del Tribunal Supremo sobre el embalse de Biscarrués ha puesto el punto final a este conflicto, consideramos que la mesa debe recoger la demanda de las compensaciones necesarias tras más de 30 años de déficit de inversiones en la zona, hasta hace unos días amenazada por la construcción del embalse", finalizan desde COAGRET.