Chunta Aragonesista ha manifestado su "indignación" con el anuncio de Nervión, empresa de limpieza industrial subcontratada por Endesa en la central térmica de Andorra, de la intención de despedir a sus 22 trabajadores. José Manuel Salvador, secretario territorial de las comarcas turolenses de la formación política, se ha mostrado "indignado" por esta decisión, que se produce pocos días después del acuerdo alcanzado con los sindicatos para garantizar el empleo de los trabajadores y las trabajadoras de las subcontratas.
Nervión ha anunciado estos despidos pocos días después de que Maessa anunciara el cierre de su actividad en la zona con el despido de otros 40 operarios. Además de la crisis sanitaria, la zona viene sufriendo una situación muy complicada con el anuncio del cierre de la Central térmica de Andorra y su sector minero. “No podemos aceptar que estos despidos se produzcan en pleno estado de alarma cuando el gobierno anunció la prohibición de despedir durante este periodo. Exigimos un cumplimiento de lo pactado, más sensibilidad con el territorio que está siendo castigado de manera bestial, compromiso con el mundo rural, su reequilibrio y la lucha contra la despoblación”.
José Manuel Salvador ha reclamado al Gobierno español y a Endesa que cumplan con el compromiso de proteger a los trabajadores y las trabajadoras de las subcontratas alcanzado el pasado 17 de abril, con la firma del Acuerdo por una Transición Energética Justa para centrales térmicas en cierre. “Garantizar la continuidad laboral de estos subcontratados es, a nuestro juicio de obligado cumplimiento, porque todavía queda mucho trabajo de limpieza en la central térmica y los trabajadores de Nervión tienen los cursillos exigidos por Endesa para su limpieza y desmantelamiento”, ha apuntado.
“Así no se lucha contra la despoblación. Esta decisión va contra el acuerdo con Endesa, contra el compromiso del Gobierno, contra la transición justa prometida y contra el mundo rural en general y las expectativas de futuro de esta zona”, ha concluido, José Manuel Salvador, mostrando su enfado por esta decisión y la "pasividad" del Gobierno español.
