CGT pide cerrar las aulas jueves y viernes ante la alerta de altas temperaturas

La legislación referente a salud laboral fija un margen de temperaturas entre 17 y 27 grados para la realización de las actividades laborales, algo que se incumple en esta ola de calor

sillas en un aula de un centro educativo vacias por altas temperaturas
Foto: Pixabay

La situación actual de alerta por altas temperaturas en Aragón tiene una incidencia de extrema gravedad en las aulas escolares, donde se están alcanzando temperaturas de hasta 35 grados, con las afecciones para la salud que conlleva tanto en personas adultas como menores.

Por ello, desde CGT exigen a la Consejería el cierre de la actividad lectiva de este jueves y viernes, 16 y 17 de junio, y que el alumnado puedan no tener que acudir a sus escuelas y evitar situaciones de riesgo para su salud, como hemorragias nasales, cefaleas, golpes de calor, lipotimias…

La legislación vigente cubre al personal docente, según el Real Decreto, el 486/1997, que establece las disposiciones mínimas de seguridad y salud que deben cumplir los lugares de trabajo; pero también al alumnado, con la Ley Orgánica 1/1996, de 15 de enero, de Protección Jurídica del Menor, que dice lo siguiente: “Las Administraciones publicas tendrán particularmente en cuenta la adecuada regulación y supervisión, de aquellos espacios, centros y servicios, en los que permanecen habitualmente niños y niñas, en lo que se refiere a sus condiciones físico-ambientales”.

La legislación referente a salud laboral fija un margen de temperaturas entre 17 y 27 grados para la realización de las actividades laborales, "algo que se incumple en estos momentos", denuncia el sindicato.

El Gobierno de Aragón tiene la obligación jurídica de afrontar este problema en los centros públicos, problema que en 2014 ya denunció CGT ante la consejera de Educación, Dolores Serrat, del gobierno entonces encabezado por Luisa Fernanda Rudi. "Tanto el gobierno del PP-PAR como los siguientes del PSOE han hecho caso omiso a estas reivindicaciones", es la conclusión que saca CGT.

Medidas a medio plazo

El adelanto de la llegada de las olas de calor y de su intensidad es una realidad que, según los expertos y expertas, ha llegado para quedarse. Según el sindicato, los distintos gobiernos territoriales y municipales tienen que tomar cartas en el asunto para afrontar el problema y hacer cumplir la legislación.

Las altas temperaturas son especialmente preocupantes por el denominado estrés térmico, que afecta a las personas mayores y a menores, por lo que la implicación de los gobiernos en la solución del problema deber ser inminente.

La mayoría de los edificios escolares se construyeron antes de que existiera una normativa básica de condiciones térmicas, por lo que no están preparados para evitar la incidencia de las olas de calor. Se trata de edificios insuficientemente aislados, con escasa protección solar en las ventanas, por ejemplo.

Hay soluciones a medio y corto plazo que pueden ayudar a paliar esta deficiencia en los edificios públicos. Diversas investigaciones del CISC han presentado proyectos europeos para mejoras la condición de los edificios con soluciones naturales (LIFE-myBUILDINGisGREEN).

Entre las medidas de estos expertos y expertas está el dotar de cubiertas vegetales a los techos de las escuelas, sombrear ventanales, fachadas con vegetación… Hay otro tipo de medidas más costosas pero eficientes tanto para el ahorro energético como para la salud; cambiar el aislamiento de los edificios más antiguos, poner toldos en las ventanas en las escuelas más pequeñas….

Desde CGT instan al gobierno aragonés, capitaneado por Javier Lambán, a tomar medidas ya mismo: cerrar las aulas jueves y viernes y crear un grupo de trabajo de personas expertas (en arquitectura, botánica…) para poner en marcha un plan de acondicionamiento de infraestructuras educativas públicas.

Por su parte, el sindicato CCOO ha propuesto la reducción de la jornada lectiva en centros escolares por la ola de calor. Este mismo sindicato ha hecho un llamamiento a las empresas para prevenir el riesgo laboral por estrés térmico.

Otras medidas contra las olas de calor también han sido planteadas por Zaragoza en Común, que ha propuesto la creación de refugios climáticos en los barrios y el centro de la ciudad para combatir las altas temperaturas; y Ganar Teruel, que reclama un plan municipal para hacerles frente.

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