El sindicato CGT no acudirá al acto de celebración del Día de la Educación Aragonesa que tendrá lugar el próximo 30 de mayo a las 12.00 horas en la Sala de la Corona del Edificio Pignatelli.
Desde esta formación sindical entienden que “no hay nada que celebrar y que, como representantes del profesorado aragonés, no podemos participar en un acto festivo mientras los centros y su profesorado están saturados de trabajo y sufriendo, curso tras curso, un aumento de la carga y de la burocracia”.
Además, advierten de que hay que tener en cuenta “la falta de voluntad negociadora de esta Administración que se niega a negociar las plazas del concurso de estabilización de interinas, por ejemplo, o que incumple su propio calendario de negocación”.
La realidad de la Educación Aragonesa, o al menos de su profesorado, es para CGT de hartazgo y de cansancio.
“Las excesivas ratios, la carga lectiva que no se ha reducido tras los recortes de Dolores Serrat, el aumento de tareas burocráticas, el aumento de los días lectivos en el calendario anual”, denuncian.
CGT, junto a STEA, iniciaron una campaña para pedir la reversión de los recortes y mostrar el hartazgo y el cansancio del profesorado, han sido más de 90 los centros que han votado en Claustros cartas exigiendo a Felipe Faci la reducción de horario lectivo, y son decenas los centros que todas las semanas se concentran para hacer visible su descontento.