El colectivo Extinction Rebellion Huesca llevará a cabo una representación dramatizada y anticonsumista en las calles de Uesca este sábado 26 a las 12.00 horas con motivo del Black Friday.
Será una marcha fúnebre por nuestro presente y futuro. “Ningún oscense habrá presenciado algo similar con anterioridad”, aseguran desde el colectivo ecologista.
El bombardeo publicitario del Black Friday está presente desde hace tiempo. Las grandes empresas, corporaciones y principales cadenas de producción instan a la ciudadanía a comprar más productos que como explican desde Extinction Rebellion “no necesitamos, forzándonos a gastar un dinero que lo podemos utilizar para otros destinos mucho más rentables y sostenibles”. Además, a pesar de los descuentos, son ofertas que no se sitúan al alcance de toda la sociedad. Las personas con ingresos bajos y que sufren la precariedad laboral aún así no podrán beneficiarse totalmente de estas reducciones en los precios. Y todo ello con el período de crisis e inflación que estamos experimentando.
Y es que ahora mismo, el Black Friday llega a sectores de toda índole: textil, tecnológico, hogar o mobiliario o juguetería.
Esta campaña es una excusa más para extender la duración de los descuentos días antes y posteriores, y que se enlaza con el Cyber Monday, con ofertas únicamente online.
La acción de Extinction Rebellion ofrece una oportunidad para reflexionar sobre la locura del hiperconsumismo en un sistema que agota los recursos de la Tierra y que origina terribles impactos en el medioambiente a través de la obtención de productos innecesarios.
Apoyar este tipo de iniciativas y actuaciones intensifica las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera, al ser transportados los elementos que se requieren para la elaboración de dichos productos desde diferentes partes del planeta, al igual que los artículos finales. En vez de apostar por los recursos disponibles en el medio local y llevar a cabo acciones más sostenibles.
“Es, por tanto, que las grandes marcas colaboran en la crisis climática y ecológica, anteponiendo el beneficio económico en lugar de proteger los ecosistemas y los seres vivos que en ellos viven. A través de sus producciones contaminan el medio acuático y afectan de manera notable en el paisaje de territorios de numerosos países, sobre todo los situados en el Sur Global”, denuncian.
Extinction Rebellion Huesca reivindica un consumo más justo y responsable, a través del cual se ponga en el centro la vida de las demás especies del planeta y la conservación de cualquier ecosistema, y por medio de un equilibrio social, sin diferencia de clases y sin el enriquecimiento de unos pocos. Porque no existe justicia climática, sin justicia social.
¿Estamos de luto por las vidas perdidas, presentes y futuras, o seguimos tambaleándonos en una danza macabra de consumismo?
Extinction Rebellion es un movimiento internacional y políticamente no partidista, descentralizada, que utiliza la acción directa no violenta, y también performance, para dar visibilidad a la Emergencia climática y ecológica a la que nos están sometiendo los gobiernos, quiénes deben actuar con justicia ante esta crisis global. En Uesca llevan menos de un año generando conciencia para tratar de frenar esta crisis.
La última acción organizada por Extinction Rebellion Huesca fue una actuación de las Rebeldes Rojas (Red Rebels en inglés), figuras originarias de un formato ideado en Gran Bretaña, y que dejó atónitas a todas las personas que paseaban por las calles del centro de Uesca con su mensaje evocador y de otro mundo para reflexionar sobre la fragilidad de nuestros ecosistemas, y la interconectividad que tenemos con el mundo.
“El sábado por la mañana, tómate un descanso de las compras y ven a buscarnos entre la Plaza Zaragoza y los Cosos, para unirte a nuestro cortejo fúnebre, o para reflexionar sobre el impacto que tiene nuestro consumismo en nuestro mundo”, concluyen desde Extinction Rebellion Huesca.
