El día 13 de octubre es el Día Internacional del Cáncer de Mama Metastásico y con ese motivo se iluminarán diferentes edificios como el Palacio Aljaferia o la fuente del parque grande José Antonio Labordeta con los tres colores que representan a la enfermedad para la Asociación Cáncer de Mama Metastásico (CMM).
El verde simboliza la esperanza; el turquesa significa la sanación; el rosa es por el origen de la enfermedad (en este caso mama), y el amarillo se asemeja al sol, las ganas de vivir. Se iluminarán los edificios aproximadamente a apartir de las 20.45 horas.
“Nosotras somos las grandes olvidadas de esta enfermedad”, señalan desde la Asociación, que surgió, entre otros motivos para lograr visibilidad, y recaudar fondos para investigación. De todo lo destinado para la investigación del Cáncer de Mama solo el 6% se dedica a la de CMM.
Sin cura
Las localizaciones más frecuentes de las metástasis en el CMM son: cerebro, hígado, huesos y pulmón. Actualmente, es una enfermedad que no tiene cura. Las estadísticas dan una esperanza de vida de cinco años de media. El 20% de mujeres con cáncer de mama metastásico tiene menos de 40 años. Con los tratamientos actuales, muchas de ellas no llegarán a los 50.
Más investigación
Representan el 20% de pacientes afectadas de cáncer de mama para los cuales, a día de hoy, no existen tratamientos efectivos capaces erradicar la enfermedad.
Del dinero dedicado a la investigación del cáncer de mama, tan solo un 6% se dedica a investigar nuevos tratamientos para los pacientes afectados de metástasis.