Este lunes se celebró un acto convocado por la Plataforma Ciudadana contra el Racismo (PCR) y la Federación Aragonesa de Solidaridad (FAS), en el que los representantes de las tres formaciones políticas, candidatos y candidatas por Zaragoza al Congreso español de los Diputados, han estado de acuerdo en secundar.
El documento recoge nueve medidas que están destinadas a garantizar la protección de los derechos de las personas que migran. “El gobierno español debe garantizar el ejercicio de derechos y tiene que habilitar políticas sociales para todas las personas, sea población autóctona, migrantes o refugiadas, en coordinación con Autonomías y Ayuntamientos. La acogida e integración de las personas inmigrantes debe ser una prioridad de las políticas sociales de los países que garantizan y respetan los Derechos Humanos y que promueven la integración social de las personas”, reza el manifiesto.
La firma de este documento se realiza con el objetivo de evitar que “haya habitantes de primera y de segunda categoría, sean de aquí o de allí, sean personas migrantes o refugiadas, cumpliendo con la justicia social y respetando los Derechos Humanos”. Susana Sumelzo del PSOE, ha querido aprovechar el acto para hacer “una denuncia del acuerdo inmoral e injusto firmado entre la UE y Turquía”, y apostar “por una sociedad libre de discriminaciones, en el que las personas de origen extranjero puedan incorporarse con igualdad de derechos y deberes”.
Para Sumelzo, “es obligatorio que se denuncie constantemente los cuatro años de parálisis y de recortes del Partido Popular”. Y continuaba, “este gobierno ha sido retrógrado, injusto y ha aplicado ideología pura y dura en el asunto de las personas refugiadas”. Cabe señalar, que aunque el Partido Popular había sido invitado a la firma de este documento han declinado la invitación, según han indicado desde FAS y PCR.
Por su parte, el candidato de Unidos Podemos al Congreso español por Zaragoza, Pedro Arrojo, ha comenzado su intervención dando las gracias por la realización del acto y afirmando que “a nivel internacional, el dinero es cada vez más libre y las personas cada vez menos”. Y proseguía, ”cada vez hay menos fronteras para los negocios y más fronteras para las personas pobres”.
Arrojo, también ha querido recordar a las anteriores generaciones que tuvieron que marcharse a otros países por culpa de la guerra. “Nuestros abuelos fueron personas refugiadas que no se fueron por gusto”, y por ese motivo “es necesario reivindicar su memoria y su mérito”. Para el candidato de Unidos Podemos, “también nuestros padres fueron emigrantes y por lo tanto, inmigrantes en países extranjeros”.
Asimismo, Arrojo ha confesado que “formamos parte de una generación donde nuestros hijos e hijas son emigrantes y eso nos debería permitir a todos y a todas ubicar nuestras responsabilidades”. También ha manifestado que “en la comunidad internacional se nos llena la boca a la hora de hablar de Derechos Humanos, y sin embargo existen escasísimos compromisos de garantía en el cumplimiento”.
Rodrigo Gómez, candidato de Ciudadanos, ha explicado que desde su partido tienen “un fuerte compromiso por los Derechos Humanos”, y señalaba que las medidas realizadas en este ámbito por el Partido Popular “han sido una auténtica vergüenza. Se comprometió a acoger a más de 16.000 personas refugiadas y las cifras reales son totalmente irrisorias”.
Para Gómez, “las personas refugiadas huyen de la guerra y es tarea de la UE acogerles porque es una obligación legal”. Y añadía, “la UE se ha convertido en una Unión económica y monetaria”, por ello, “es necesario volver a los valores por las que se creó”.
En el contexto actual es necesario que tanto las políticas aplicadas por los Estados europeos como las demandas de la sociedad civil, vayan encaminadas a reclamar un compromiso absoluto para con las personas refugiadas. No podemos olvidar que la firma del acuerdo entre la UE y Turquía vulnera los tratados internacionales de Derechos Humanos.
Incluso, el Estado español sigue siendo cómplice contraviniendo la defensa de los Derechos Humanos, con la aplicación de expulsiones sumarias y el uso de la violencia en Ceuta y Melilla contra las personas inmigrantes que se juegan la vida para tener otra oportunidad. Políticas, que no hacen sino que fomentar el comportamiento racista y xenófobo de algunos sectores de la sociedad. Esa parte de la sociedad que sigue sumida constantemente en la ignorancia y el miedo ante lo desconocido.
[alaya_toggle status="open" title="Nueve medidas recogidas en el documento:"]
- Poner en marcha medidas que protejan la llegada de las personas migrantes y refugiadas, buscando vías y corredores seguros que garanticen sus vidas con recursos y políticas adecuadas.
- Diseñar e implementar acciones de observación y monitoreo de los Derechos Humanos en frontera terrestre, aérea y marítima.
- Revisar las políticas de gestión de flujos migratorios y de regulación y control de entrada en territorio, aplicando una perspectiva de respeto y garantía de los Derechos Humanos y de justicia social y no tanto de seguridad, de modo que una aplicación menos restrictiva de la entrada permita combatir y reducir las redes de tráfico y trata de personas.
- Trabajar para el cierre definitivo de los CIES, la no penalización de la migración, la restitución de la sanidad universal para la población extranjera que reside en España y el fin de las devoluciones en caliente, que vulneran derechos básicos de las personas como es el de solicitar protección internacional.
- Diseñar y aplicar políticas de inmigración, que abarquen todas las esferas de la vida humana (educación, atención social, sanidad, convivencia, participación social y política y ciudadanía), dotadas de presupuesto y personal, y con metodologías especializadas, que defiendan los derechos fundamentales y respeten los derechos humanos y favorezcan la convivencia y la plena participación de las personas migrantes y refugiadas.
- Incrementar políticas concretas y eficaces que nos encaminen hacia una sociedad plenamente inclusiva e intercultural.
- Aumentar políticas concretas y eficaces de cooperación al desarrollo que garanticen la solidaridad española con otros países, así como acciones puntuales de ayuda humanitaria en zonas de conflicto o desastre natural.
- Adoptar políticas exteriores coherentes que contribuyan a atajar la pobreza y la desigualdad: económicas, fiscales, comerciales, pesqueras, agrícolas y medioambientales.
- Promover en el seno de la Unión Europea penalizaciones concretas para los países que incumplan los tratados sobre comercio de armas.
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