Al menos diez personas han fallecido y otras tres permanecen desaparecidas como consecuencia de la riada que inundó el martes por la noche la localidad mallorquina de Sant Llorenç des Cardassar y alrededores. Hasta 257 litros de agua por metro cuadrado han caído en puntos de Sant Llorenç, según el Govern balear.
De esta forma, más de 100 personas tuvieron que ser evacuadas y el suministro eléctrico quedó interrumpido en varios pueblos de la zona. Tres de las personas fallecidas son extranjeras (dos ingleses y una holandesa).
La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha expicado que un operativo de unas 800 personas está buscando a tres personas desaparecidas tras las inundaciones que afectaron la Comarca del Llevant.
Según ha detallado el Servicio de Emergencias 112 a través de su cuenta de Twitter, en las últimas horas se ha notificado la desaparición de dos personas de origen alemán. La otra persona a la que se está buscando es un niño de cinco años, cuya madre es una de las víctimas mortales de la riada que afectó el pasado martes a la Comarca del Llevant de Mallorca.
"El número de desaparecidos aumenta a tres porque, además, del niño que estamos buscando hemos sabido de otras dos personas de nacionalidad alemana", ha explicado Armengol en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press.