NAIZ.INFO | Beñat Zaldua | Carles Guillot, que perdió un ojo por el impacto de una bala de goma, presentó ayer por la mañana junto a la plataforma Stop Bales de Goma la querella con la que denunciará al Estado español por el uso de estos proyectiles.
Corría el año 2001 cuando, durante un desalojo en el barrio barcelonés de Gràcia una bala de goma impactó en el rostro de Carles Guillot, haciéndole perder un ojo posteriormente. Pese a la identificación de un agente de policía como responsable del disparo, la justicia archivó el caso sin concluir ni siquiera la fase de instrucción. Posteriormente, tanto la Audiencia Nacional, el Tribunal Supremo como el Tribunal Constitucional han negado, a lo largo de 11 años y dos meses de procesos judiciales, cualquier tipo de indemnización para Guillot.
Vista la dejación de la Justicia española, Guillot ha decidido ahora llevar su caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo de la mano de la plataforma Stop Bales de Goma, con el objetivo de buscar justicia para él y conseguir un dictamen contundente respecto al uso de balas de goma en el Estado español, donde nueve personas han muerto desde la denominada transición por el uso de estos proyectiles, 26 han perdido un ojo y 30 han sufrido lesiones permanentes.
Así lo explicaron ayer los abogados Jaume Asens y Anaïs Franquesa, responsables de la querella que se presentará en Estrasburgo acusando al Estado español de vulnerar el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales. Concretamente, la querella acusa al Estado de violar los artículos 6.1 –derecho a un juicio justo en un plazo razonable– y 3 –prohibición de tratos inhumanos o degradantes–.
Según informó Stop Bales de Goma, durante la rueda de prensa, Asens declaró que "la bala de goma es incontrolable y arbitraria", por lo que defendió que "tal y como se abolió la tortura, ahora se pueden abolir estas armas". Por su parte, Franquesa recordó que "no se hizo ninguna investigación de los responsables de una vulneración flagrante del derecho con unas lesiones importantes".
Los impulsores de la querella también recordaron la puesta en marcha de una campaña de crowdfunding con el objetivo de recaudar 4.000 euros, que servirán para cubrir los gastos que conlleva la presentación de una querella en el Tribunal de Estrasburgo.
Novedades en el caso Quintana
En la rueda de prensa también compareció Ester Quintana –que perdió un ojo durante la huelga general del 14 de noviembre en Barcelona–, quien valoró las últimas novedades de su caso, después de que el martes se conociese que siete agentes de la Brigada Móvil de los Mossos d'Esquadra han sido apartados de su puesto por haber ocultado que se hallaban en el lugar donde Quintana fue herida y que habían disparado una salva, algo que hasta ahora habían negado.
Su abogada, Laia Serra, consideró que "el caso de Ester ha dinamitado la credibilidad de los Mossos", mientras que la propia afectada reivindicó que el lema ‘Todos somos Ester Quintana’ "quiere decir que a cualquiera le puede pasar lo que a mi y eso se tiene que acabar".
