Siria, el nuevo orden criminal y la basura de occidente

Desde el Foro Palestina Libre de Zaragoza quieren compartir el análisis que han realizado sobre la complejidad del conflicto en Siria, “esperamos que este texto sirva a sus lectoras para comprender que hay muchos intereses en juego que poco tienen que ver con los derechos o la protección del pueblo en Siria”, señalan desde el Foro. Publicamos a continuación, dada su extensión, un extracto con el esquema del texto y el link donde poder leer íntegramente el documento de análisis elaborado por el Foro Palestina Libre de Zaragoza. Siria, el nuevo orden criminal y la basura de occidente Llevamos semanas …

SIRIADesde el Foro Palestina Libre de Zaragoza quieren compartir el análisis que han realizado sobre la complejidad del conflicto en Siria, “esperamos que este texto sirva a sus lectoras para comprender que hay muchos intereses en juego que poco tienen que ver con los derechos o la protección del pueblo en Siria”, señalan desde el Foro.

Publicamos a continuación, dada su extensión, un extracto con el esquema del texto y el link donde poder leer íntegramente el documento de análisis elaborado por el Foro Palestina Libre de Zaragoza.

Siria, el nuevo orden criminal y la basura de occidente

Llevamos semanas asistiendo al intento desesperado de la administración Obama de crear las condiciones de un ataque contra Siria. Y lo de “contra Siria” es importante recalcarlo, porque cuando se habla de atacar al “régimen sirio” nadie con dos dedos de frente puede esperar un bombardeo selectivo de un puñado de objetivos militares que -abracadabra- produzca un cambio de gobierno. Hagan un repaso a todas y cada una de las “intervenciones humanitarias” impulsadas por EEUU...

... Arrasarían ciudades, pueblos, carreteras, puentes, fábricas y lo que les diera la gana.Como siempre, miles de civiles asesinados. Los medios de vida de los supervivientes serían destruidos. Es el pueblo el que paga. Ese pueblo sirio al que todos dicen querer ayudar librándole de su gobierno, aunque las propias encuestas de la ONU digan que el 70% de la población prefiere ese gobierno -simpatice o no con él- al futuro que llega de lamano de mercenarios y yihadistas extranjeros. Ninguno de esos datos y ninguna de esas razones es motivo de celebración, pero la más criminal de todas es siempre (repetimos: siempre) la que acaba apoyada por la OTAN.

Ahora bien. En esta ocasión hay algo diferente. Ya no vemos la rápida determinación que mostró Bush en 2001 para invadir Afganistán o en 2003 para destruir Irak. Tampoco la misma velocidad a la que Obama consiguió una coalición para matar a miles de civiles en Libia, muertos que “ya no tienen que soportar ninguna dictadura”, a diferencia de los millones de saudíes, bahreiníes, qataríes... que viven bajo el integrismo medieval. Paraque los EEUU se metan en esta chapuza sólo hay una explicación: hace tiempo que no son la sombra de lo que fueron, en la región y en el mundo. De ese mundo unipolar del “fin de la historia” ya no quedan ni las cenizas, como demuestra el hecho de que nadie acompañe las bravuconadas yanquis. Nadie quiere pagar el coste. EEUU tiene mucho que perder y muy poco que ganar, pero no se puede decir lo mismo de Turquía, Arabia Saudí o en menor medida -muchísimo menor-, Israel. Hace tiempo que estos actores regionales ejecutan su propia política exterior sin consultar al viejo amo del mundo. Aunque el poder económico y militar de EEUU sea mayor, ya no controla los deseos de esos estados. La guerra en Siria explica todo esto. Vayamos por partes.

¿Pero qué pasó en Siria?

Desde la caída de la URSS, el gobierno sirio emprendió una política neoliberal que, entre otras medid as, privatizó la tierra. Las clases altas se hicieron con enormes latifundios a precio de saldo para el monocultivo, empobreciendo a los campesinos y desplazándolos hacia los nuevos guetos urbanos. Esta situación, unida a la mayor sequía en los últimos 50 años (2009 y 2010), provocó un enorme descontento. Las protestas que se desataron en las zonas rurales fueron protestas populares, efectivamente, pero sólo al principio. Unos años antes, Siria y Arabia Saudí habían normalizado relaciones diplomáticas, lo que llevó a los saudíes a invertir masivamente en el negocio inmobiliario de las ciudades sirias. Una vez comenzaron las protestas rurales, los saudís aprovecharon la ocasión para atacar al gobierno sirio paralizando totalmente la construcción de viviendas en los guetos, elevando el desempleo y el acceso a la vivienda y alimentando el descontento de parte de la población contra el gobierno. Las protestas se extendieron por las principales ciudades, la represión las apaciguó y Assad anunció una serie de reformas -entre ellas el fin del partido único y la convocatoria de elecciones locales, parlamentarias y presidenciales-. (leer informe completo).

Los campeones regionales de la democracia

El principal ganador de esta criminal partida de ajedrez por un cambio de régimen en Siria es Arabia Saudí. “Cambio de régimen” significa ejecución civilizada o linchamiento -poco les importa- de un presidente para colocar otro más afín: un musulmán suní de la cuerda de los saudíes, a ser posible wahabita. Pura democracia, en resumen. Todo sea por los derechos humanos, ¿verdad, queridos “aliados”? (leer informe completo)

El hijo pródigo de la OTAN y el enemigo nº 1

Turquía también tiene mucho que decir en la guerra contra Siria. Pensar en Turquía como una marioneta de la OTAN es repetir la clásica pifia eurocéntrica. La Turquía de Erdogan ha mantenido unos altísimos índices de crecimiento económico -llegando en ocasiones a superar a China-, es un gran exportador de materias primas y de productos finales, y su situación la convierte en pivote comercial entre Europa y Asia. Su “islamismo moderado”, su pertenencia a la OTAN y sus buenas relaciones con Israel -olviden el teatrillo por el asesinato de los 11 activistas turcos en la Flotilla a Gaza- le convierten en el socio perfecto en la región. Turquía es ya una potencia comercial y militar en la zona, con capacidad para hacer una política exterior propia e independiente sin dejarse arrastrar por nadie -mucho menos por una potencia en declive como EEUU-. (leer informe completo)

¿Queréis un “pueblo”? Ahí tenéis uno

El petróleo es dinero y por dinero se hacen guerras, pero no podemos perder de vista el mapa completo de la situación. Aquí también hay una cuestión de soberanía sobre la mesa. Cuando se habla de “soberanía”, a menudo pensamos en el derecho a decidir”. Pues bien: en este caso, el ejercicio de la soberanía por parte de Turquía choca con el derecho a decidir del Pueblo Kurdo. Aunque pase desapercibido para los todólogos de nuestros medios de desinformación, comprender este factor es fundamental para entender lo que pasa en Siria o por qué a Turquía le urge tanto una intervención internacional. (leer informe completo)

Y en EEUU... fracaso seguro. Y Europa... dando vergüenza

En la zona hay grandísimos intereses en juego que poco tienen que ver con Siria, mucho menos con las libertades civiles de los sirios o con la protección de sus vidas. Mucho más tienen que ver con los suspiros de Arabi a Saudí o Turquía por convertirse en los nuevos centros de poder de la región. (leer informe completo)

¿Y España?

En el Reino de España tenemos un PP que sabe muy bien lo escocido que se puede salir de una guerra de invasión, pero tiene enormes intereses que mantener. Teme por los deseadísimos contratos para que el grupo español Fomento construya un AVE saudí entre La Meca y Medina y FCC construya tres líneas de metro en Riad. Al contratista Borbón le va a tocar hacer equilibrismo con su amiguito del alma, el dictador saudí. Por eso apoya toda condena contra Assad, reconoce a los rebeldes, mercenarios y yihadista s como único interlocutor válido del pueblo sirio (aunque la mayoría sean extranjeros) y, a la vez, dice que prefiere una solución política. Y ya está. Margallo y Rajoy irán donde vaya Vicente, con tal de cumplir con su tarea de mamporreros empresariales, políticos y militares -si no hay más remedio-. (leer informe completo)

¿Y la solidaridad entre los pueblos?

El conflicto en Siria es posiblemente el conflicto más complejo y delicado al que hayamos asistido desde que terminó la guerra fría. No por ello deja de tener una serie de rasgos comunes con todos los conflictos en los que se mete la insultantemente mal llamada- “comunidad internacional”. Por un lado está la constante presión de los productores y comerciantes de armamento. Para ellos no hay más lógica que la del negocio de la guerra. “Muertos = dinero”, siempre por encima de cualquier cálculo político. Estos mercaderes envueltos en banderas patrioteras no se plantean las consecuencias de su negocio. En cualquier país, sea en EEUU o en España, los que producen las armas son o han sido parte del gobierno. Entre guerra o no guerra, siempre gana un beneficio personal que necesita la guerra permanente. Siempre habrá un enemigo al que combatir. Es asqueroso contemplar cómo se siguen usando argumentos como los derechos humanos, el derecho internacional o la protección de civiles para justificar la eterna avaricia de quienes se ganan la vida fabricando muerte. (leer informe completo)

Foro Palestina Libre de Zaragoza | Para AraInfo

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