Dos sindicatos sectoriales, Médicos de Atención Primaria de Aragón -CESM Aragón- y FASAMET, han remitido esta semana un escrito a la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, solicitando “una reunión urgente para abordar soluciones conjuntas a la enorme presión asistencial y situación extrema que padecen” algunos Centros de Salud de Aragón.
Las profesionales recuerdan en su misiva que “ya en la pasada reunión de la Mesa Sectorial, celebrada el 23 de julio, plantearon numerosas propuestas al Gobierno de Aragón, que de momento no han sido tenidas en cuenta. Entre ellas, reforzar las plantillas, la puesta en marcha de un punto de Auto-Covid de pruebas PCR para toda la población como el que funcionó durante el estado de alarma en el Hospital Militar de Zaragoza, crear grupos EDORE (equipo de atención domiciliaria de residencias) en cada sector sanitario de Zaragoza o campañas informativas para concienciar a la población sobre la situación y los trabajos que se realizan en los centros de salud”.
Además, recuerdan que el pasado día 3 de agosto enviaron un escrito al director gerente del Servicio Aragonés de la Salud, Javier Marión, reiterando algunas de estas cuestiones y añadiendo otras motivadas por la progresiva escalada de la presión sanitaria y de los contagios registrados entre los y las profesionales. Entre ellas, el sindicato de Médicos de Atención Primaria reclamaba “informar del resultado de las pruebas PCR en un máximo de 24 horas –ahora se demoran entre 3 y 5 días- y una desinfección exhaustiva por dentro y por fuera de los centros, especialmente los de las zonas más afectadas en la capital aragonesa y la ciudad de Uesca”.
Refieren numerosos contagios y bajas laborales entre el personal sanitario
Según los últimos datos difundidos por la DGA, desde el comienzo de la pandemia se han registrado en Aragón un total de 1.184 contagios de COVID-19 entre profesionales. “En los apenas dos meses transcurridos desde el final del estado de alarma se ha producido un aumento del 38,8 %. A fecha de 10 de agosto, según los datos oficiales, hay 350 profesionales de baja laboral por COVD-19, un incremento en lo que va de mes de casi el 60 %, de los que 82 corresponden a médicos”, señalan.
Ante esta situación, CESM Aragón y FASAMET reclaman en el escrito enviado a la consejera “la realización de tests a todo el personal sanitario y sociosanitario, así como el personal sanitario de Salud Pública, para conocer la situación real del personal de los centros y evitar una diseminación de la enfermedad, en caso de ser pacientes asintomáticos y establecer un Plan periódico para controlar a todos estos trabajadores -y trabajadoras- de forma continuada”.
La Atención Primaria está pasando, según estos Sindicatos sanitarios, “momentos muy duros, desde primeros de julio, especialmente, en muchos Centros de Salud de Zaragoza y zonas limítrofes, y en otras zonas de salud del territorio, por el elevado número de pacientes a atender, la escasez de recursos, el cansancio y fatiga del personal, las bajas de personal, las jubilaciones que se están produciendo con poco personal de relevo, etc. El día a día son consultas médicas de más de 70 atenciones, realización de más de 80 PCR en los centros, consultas presenciales y no presenciales desbordantes, domicilios y urgencias, falta de espacios en muchos centros que impide la separación de pacientes sanos de los casos con sospecha o confirmados de COVID-19, etc”.
Por todo ello, y dado que la “situación extrema que se está produciendo en muchos Equipos de Atención Primaria de Aragón está llegando al límite”, las profesionales solicitan a la consejera Repollés “la convocatoria urgente de una reunión para abordar el problema sanitario que estamos viviendo y buscar, entre todos, las medidas necesarias para paliarlo y mejorarlo, en la medida de lo posible”.
