La Candidatura Independiente de SARGA denuncia la "falta de voluntad" de los nuevos responsables de la empresa nombrados por el Gobierno de Aragón, para "solucionar los problemas de transparencia y clientelismo" que "tantas veces han sido denunciado en las Cortes de Aragón". La Candidatura Independiente indica que "se trata de cambiar los mecanismos de funcionamiento de la empresa para que esté quién esté en el Gobierno, las cuestiones denunciadas no vuelvan a suceder".
Desde la Candidatura se señala "el poco diálogo por parte de la empresa en cuestiones como los despidos de trabajadores no directivos". "Los cambios que desde el Gobierno de Aragón se decía iban a suceder, hasta el momento parecen no existir", critican.
El último caso que ha levantado polémica en la Candidatura Independiente ha sido "el nombramiento de trabajadores para desarrollar funciones de categoría superior sin llevar a cabo un proceso de selección y asignación de funciones transparente". "Estos trabajadores -afirman- han sido elegidos a dedo por uno de los directivos a cargo de los Espacios Naturales Protegidos, a espaldas del colectivo de trabajadores, sindicatos y la sociedad misma".
Desde la Candidatura Independiente se señala el "hartazgo" que produce "tener que ir detrás de la empresa 'investigando' qué es lo que esta hace para poder romper los círculos viciosos que ésta arrastra desde Sodemasa y Sirasa", y que "parece no tener intención de cambiar".
Para la Candidatura Independiente, "este ocultismo que continua vigente da lugar a casos como el de la barrera de Ordesa del pasado año en el que las y los trabajadores incumplían los turnos de descanso mínimo que marca la ley produciéndose situaciones claras de abuso y desprotección del trabajador". Denuncias como esta y otras sabidas por el Gobierno de Aragón que "parece preferir dejar de lado, y no investigar para corregir", abundan.
Desde la Candidatura Independiente se pide que la empresa trate con los sindicatos, y "sobre todo de cara a la sociedad, las decisiones que se tomen dentro de ésta, y no sólo se lleve a cabo un lavado de imagen sin fondo, limitándose a cumplir el protocolo con los representantes de los trabajadores, sin tratar los temas que realmente importan a la sociedad: la transparencia en las contrataciones y el nombramiento de cargos dentro de la empresa, dónde va el dinero y cómo se gestiona, la afectación a los servicios que la empresa presta de decisiones como despidos…". "Se espera por tanto, que de una vez se abra un diálogo serio con los sindicatos y más allá de una mera formalidad", apostillan.
"Si se continua como hasta ahora, con el mismo funcionamiento, se llegará al mismo lugar sólo que con otros colores políticos", concluyen.