Esta semana el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro, visitaba las obras del recrecimiento de Yesa, y planteaba un objetivo de finalización de las mismas en 2018, plazo que se podía alargar “teniendo en cuenta que el objetivo es que se realicen con plenas garantías técnicas y de seguridad”. De Pedro señalaba que la ladera estaba estabilizada y que los problemas de seguridad en la presa del embalse ya estaban resueltos, dando el asunto de los deslizamientos por zanjado.
"De Pedro reconoció algo que han negado durante casi dos años: que estos problemas existían. Pero vuelven a mentir", denuncian la Asociación Yesa+no y la Asociación Río Aragón.
Han pasado sólo tres meses desde que la Confederación Hidrográfica del Ebro anunciara "a bombo y platillo" que tras las obras de emergencia que este mismo organismo implementó y que han costado 25 millones de euros, la ladera derecha de Yesa al fin se había detenido. Así lo dejó claro tras asegurar "un control exhaustivo y una rigurosa observación" del deslizamiento.
"Por si esto fuera poco, en un intento de dar carpetazo a este asunto, la CHE decidió unilateralmente dejar de enviar los datos de las mediciones en la ladera a los organismos públicos que hasta entonces las recibían", recuerdan Iker Aramendia Landa, presidente de la Asociación Yesa+no y Luis Solana Garcés, presidente de la Asociación Río Aragón.
Tras ésto, y sin responder ya ante nadie, comenzó un vaciado del embalse que ha llegado incluso hasta el 40% de su capacidad (10 octubre) por primera vez desde que se registraron los primeros movimientos en junio de 2012.
"La realidad a veces es tozuda y los hechos muestran que la CHE ha mentido una vez más", aseveran Aramendia y Solana.
Ambas asociaciones recuerdan que ya en el año 2006, la CHE ocultó durante siete meses el deslizamiento del monte Melida en la ladera izquierda, que salió a la luz por una filtración. También en la ladera derecha, en 2013, la CHE tardó ocho meses en reconocer los movimientos, "cuando su postura ya era insostenible y el desalojo de las urbanizaciones urgente".
En el caso de estas nuevas grietas, que comienzan en la zona de seguridad que la propia CHE estableció, pero que salen de estos límites docenas de metros, han vuelto a ser las y los ciudadanos quienes muestran qué sucede en Yesa. "Y es inadmisible que esta sea la normalidad cuando es un organismo público el que está a cargo de las obras", apostillan.
Los portavoces de las asociaciones, Solana y Aramendia, consideran los hechos, "tanto si la CHE conocía este movimiento y lo ha ocultado, como si le ha pasado por alto", de "absoluta gravedad", que "vuelven a mostrar la incompetencia y opacidad de la CHE".
"El mismo organismo predemocrático a quien tanto gusta presumir de transparencia, el mismo que se negó a comparecer en el Congreso de los Diputados, las Cortes de Aragón y el Parlamento Foral de Navarra; vuelve hoy a mentir a todos los ciudadanos y ciudadanas con la impunidad y prepotencia a la que nos tiene acostumbrados", subrayan.
A juicio de las asociaciones, "la CHE mintió asegurando que la ladera derecha del embalse de Yesa está estabilizada y que los movimientos en la misma se han detenido; la CHE mintió cuando garantizó en el Pacto del Agua de Aragón que no se iban a desalojar más pueblos, mientras hoy, en la mesa del Magrama descansan los expedientes de expropiación de 103 viviendas en Yesa; la CHE mintió al decir durante meses que no había problemas de seguridad en la presa de Yesa, que ahora reconoce".
"Reconocen que ha habido problemas de seguridad en la presa tras negarlo durante meses -añaden-, pero dicen que ya están resueltos. ¿Por qué entonces expropian las 102 viviendas de la ladera? ¿Por qué sigue cerrada la carretera nacional a su paso por la presa después de 20 meses y la promesa continuada de una vuelta a la normalidad? La palabra seguridad en su discurso no tiene credibilidad".
Por todo ello, desde las asociaciones Río Aragón y Yesa+No, instan a la Confederación Hidrográfica del Ebro a "que de una vez por todas paralice el despropósito en el que se ha convertido el recrecimiento del embalse de Yesa. Y que antes de replantearlo se tenga en cuenta el presupuesto actual de la obra, que ya casi cuadruplica al inicial".
Además exigen que "ponga al frente de la seguridad de la presa actual y de la estabilización de la ladera (en caso de que sea posible) a un equipo de técnicos independientes" tutelado por ayuntamientos y gobiernos territoriales; que vacíe "cautelarmente" el embalse hasta una cota de seguridad aceptable; que "deje de ocultar información y de mentir a la ciudadanía, volviendo a enviar informes periodicos a las administraciones sobre el estado de las laderas, así como los correspondientes a julio, agosto, septiembre y octubre; y que depure responsabilidades técnicas y políticas por la nefasta gestión que se está haciendo tanto de la obra como de los gravísimos problemas de seguridad que está causando".
Así mismo, las asociaciones vuelven a constatar cómo las advertencias del ingeniero del actual embalse, René Petit y las tesis de otros expertos como el doctor Antonio Casas, se corroboran "una vez tras otra".
"Mientras la CHE, con la misma impunidad con que desoyó a quienes denunciaron el desastre ecológico sin precedentes que ha supuesto en Aragón el vertido de lindano en el río Galligo, vuelve a desoír a quienes previenen, una vez tras otra, de las funestas consecuencias de las obras de Yesa, que se alargan ya más de 7 años sin ser siquiera cuestionadas", concluyen.
CHA también acusa a De Pedro de mentir
Para CHA la Confederación Hidrográfica del Ebro y su presidente, "no son de fiar, ya han demostrado en numerosas ocasiones que son expertos a la hora de manipular, mentir y ocultar información, actuando con irresponsabilidad y negligencia, dilapidando millones de dinero público, con proyectos que casi siempre tienen enormes sobrecostes".
"Y es que solo han pasado tres días de dicha visita y se ha conocido la existencia de nuevas grietas en la ladera derecha, lo que demuestra que tienen razón los geólogos que alertan que la cerrada de Yesa no va a dejar de moverse", aseveran.
CHA considera que el criterio de precaución debe de imperar frente al resto de intereses, porque el deslizamiento se reactiva fruto de condiciones meteorológicas, y de las propias obras del recrecimiento.
"¿Por qué el Gobierno de España no permite que el presidente de la CHE venga a dar explicaciones a las Cortes de Aragón?", se preguntan en CHA. Para el diputado Joaquín Palacín, “las y los aragoneses nos merecemos conocer el por qué el presupuesto inicial de Yesa ha aumentado un 320%, pese a que las obras en 12 años tan apenas han avanzado”. "¿Cómo se puede hablar de pequeños deslizamientos cuando han sido 25 millones de euros los invertidos de momento para que la ladera no se viniera abajo?", pregunta Palacín.
"Es hora de asumir responsabilidades y desde CHA estamos hartos de tantas mentiras, tanta manipulación, tantas medias verdades y tanto dinero despilfarrado", concluyen.