Hace ya 20 años, durante la primavera de 2001, 29 hélices empezaron a girar en la Sierra de San Just (Escucha). Había llegado el primer parque eólico y así empezaba la historia de las renovables en la provincia de Teruel. En aquel momento no se disparó ninguna alarma e incluso el proyecto fue recibido con los brazos abiertos por la sociedad turolense ante lo que se presentaba como una fuente de ingresos y una forma de asentar población. Han pasado muchas cosas durante estos veinte años. El agotamiento de los combustibles fósiles cada vez es más evidente y algunas personas …
