LA DIRECTA | Manel Ros | Cuarto día seguido que el barrio se moviliza contra la actuación del Ayuntamiento y TMB a raíz del desalojo y derribo de una parte del centro social de Can Vies. Cuarta noche también de disturbios en Sants -nadie recuerda cuatro días seguidos de enfrentamientos en la historia reciente del barrio-.
Barcelona.- Las protestas de este jueves empezaron a las 21.00 horas en la plaza de Sants, donde Can Vies había convocado una nueva cacerolada. A las nueve en punto empezaban a resonar las cazuelas no sólo en la plaza sino en muchos de los balcones del vecindario. En los primeros momentos un millar de personas se habían reunido en el centro del barrio, pero la cifra iba aumentando a medida que pasaban los minutos. Al final de la cacerolada, momento en que un miembro de Can Vies leyó un manifiesto, ya había más de 2.500 personas.
Solidaridad con las personas detenidas
La lectura del manifiesto volvió a recordar las cuatro demandas de Can Viess en este conflicto: la dimisión de Xavier Trias, alcalde de Barcelona, y Jordi Martí, regidor del distrito –demanda recibida con muchos aplausos—; la libertad sin cargos de todas las personas detenidas; que la policía se vaya del barrio; y que se paren todos los desalojos de los centros sociales y los desahucios. En el momento que se terminó de leer el manifiesto se anunció el recorrido y el objetivo de la manifestación: ir hasta la comisaría de Les Corts ha pedir la liberación de las personas detenidas –18 en aquellos momentos.
La manifestación ha transcurrido de forma pacífica en todo momento. Llegados al cruce entre la calle Nicaragua y Travessera de Les Corts, los y las manifestantes se encontraron con un fuerte cordón policial que les impedía llegar hasta la comisaría. Entonces giraron por la calle Nicaragua dirección plaza de Sants y pocos metros más adelante se dió por desconvocada la manifestación. A pesar de esto, los y las manifestantes han ido bajando hasta plaza de Sants donde parecía que la noche acabaría allí.
Gran despliegue de policías de paisano
Pero no fue así. Pocos minutos después de las las once de la noche se volcó el primer contenedor en la calle de Sants. A partir de aquel momento varios manifestantes empezaron a quemar contenedores y romper varias cabinas de teléfonos, así como varias sedes bancarias. Una sede del Banco Popular, después de que se rompieran los vidrios, sufrió un pequeño incendio a su interior que más tarde apagarían los bomberos. A la altura de la calle de Sants con la calle Espanya Industrial se quemaron más contenedores y se improvisó una barricada. Desde allí varios manifestantes lanzaban piedras contra los Mossos situados a unos 50 metros. Después de varias advertencias de la policía pidiendo a los y las manifestantes que se dispersaran, fue hacia las doce de la noche cuando los Mossos empezaron la carga, disparando salvas y proyectiles de foam. Rápidamente todas las personas allí concentradas se dispersaron por las calles cercanas, mientras los Mossos efectuaban las primeras detenciones –4 personas– en la misma calle de Sants.
Las y los manifestantes se dispersaron rápidamente y la calle de Sants recuperó la calma, mientras los Mossos, avisados en todo momento por un gran despliegue de policías de paisano –muchos de ellos con sudaderas con capucha y algunos con las caras medio tapadas– empezaron a hacer más detenciones. En la calle Guadiana, se practicó la detención masiva de 14 personas que se refugiaban en un portal, elevando a 21 el número de personas detenidas. Los Mossos continuaron recorriendo todo el barrio de Sants identificando de forma aleatoria a las personas que pasaban por allí, como el caso de un joven italiano que paseaba tranquilamente por la calle Guadiana.
Menos enfrentamientos que la noche anterior
A pesar de la espectacularidad de las imágenes, los enfrentamientos con la policía fueron menores que la noche anterior y de forma mucho más dispersa, limitándose en todo momento tan sólo a la calle de Sants. Pero lo cierto, es que sí han sido los cuartos de forma consecutiva.
Por su parte, en el barrio de Gràcia se dejaron varias bolsas de basura ante la sede del distrito en apoyo a Can Vies y se colgó una pancarta en el balcón del distrito donde se podía leer “Can Vies resisteix en cada espai alliberat” (“Can Vies resiste en cada espacio liberado”). En Cornellà se tiraron unos globos de pintura y se realizaron varias pintadas de "llibertat detinguts" y "Can Vies no es toca" en la sede de Convergencia Democrática de Catalunya, para denunciar la actuación de esta formación en el conflicto.
La actividad en torno a Can Vies ha vuelto hoy por la mañana con una rueda de prensa de Can Vies a las 10.00 de la mañana y una concentración en apoyo de las personas detenidas a las 11.00 de la mañana en la Ciutat de la Justìcia.
A la vez continúan convocadas una nueva cacerolada para esta noche, 21.00 horas, en plaza de Sants y para el sábado una concentración a las 10.00 de la mañana a Can Batlló, para según los y las convocantes “reconstruir Can Vies”. El sábado acabará con una manifestación a las 18.00 de la tarde en plaza Universidat donde animan en los barrios a bajar en columnas hacia el centro de la ciudad.
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