Los peores años en la historia reciente de la educación aragonesa

El curso escolar finaliza de la misma manera que comenzó allá en el mes de septiembre, con recortes que supondrán nuevos despidos de docentes y todo ello camuflado bajo el eufemismo de excelencia educativa y bajo un montón de mentiras, aunque por mucho que repitas una mentira no se convierte en verdad. Comenzó el curso con 1044 docentes menos en plantilla, por mucho que la Consejería de Educación lo intentase maquillar jugando con las cifras y confirmando sólo 450 docentes menos. Y termina con una Mesa Sectorial en la que la Administración confirma un recorte de cientos de docentes en …

EscuelaPublicaCamisetaEl curso escolar finaliza de la misma manera que comenzó allá en el mes de septiembre, con recortes que supondrán nuevos despidos de docentes y todo ello camuflado bajo el eufemismo de excelencia educativa y bajo un montón de mentiras, aunque por mucho que repitas una mentira no se convierte en verdad.

Comenzó el curso con 1044 docentes menos en plantilla, por mucho que la Consejería de Educación lo intentase maquillar jugando con las cifras y confirmando sólo 450 docentes menos. Y termina con una Mesa Sectorial en la que la Administración confirma un recorte de cientos de docentes en plantillas y en las vacantes de traslados y un aumento lectivo en Secundaria a 21 horas que también supondrá un importante descenso en plantillas.

Si hablamos de recortes, tenemos que definir que han sido dos los grandes objetivos de la Consejera, Dolores Serrat, por un lado los recortes y el desmantelamiento de la Escuela Rural, con medidas como el cierre de escuelas con menos de 6 alumnos, el cierre de Ciclos de Grados Superiores en los Centros de FP rural y la supresión de 1º y 2º de la ESO en los colegios. Estas medidas van a tener un grave impacto sobre todo en zonas rurales de Uesca y Teruel.

El otro objeto de la Consejera tiene que ver con el desmantelamiento de la Escuela Pública, muchas de las medidas y actuaciones de este curso han supuesto un desvío de programas y fondos económicos hacia la red Privada-Concertada, medidas que van en detrimento de la Escuela Pública. Quizá la medida más grave de estos dos años de gobierno PP-PAR ha sido el Plan de Bilingüismo ideado por el Director de Política Educativa, Manuel Magdaleno antiguo director del Colegio Jesuitas. El llamado PIBLEA se diseña pensando más en los centros concertados, lo cual se ha notado en la gran cantidad de estos centros que han solicitado ser bilingües, y el desvió de alumnado hacia dichos centros va a suponer un grave perjuicio para la Pública.

Y todas estas medidas se han visto rodeadas de un endurecimiento de la actuación de la Consejería, actuación que nos recuerda a tiempos pasados. No solo la Consejería se ha negado a negociar o tan siquiera informar de medidas que por Ley deberían ser negociadas en Mesas Sectoriales sino que se está caracterizando por el uso de la represión o de la mentira. Muchos son los ejemplos de estas dos actuaciones; la denuncia de Dolores Serrat hacía los docentes y alumnos que hicieron una performance cerca de su domicilio, la prohibición desde Delegación de Gobierno a las manifestaciones solicitadas por Marea Verde o CGT por pasar frente al domicilio de la Consejera, la detención de maestros en las protestas que se ha hecho contra su persona, son algunos de los ejemplos de represión. Pero también esta Consejería se ha destapado por sus mentiras y sus incumplimientos; la supresión del derecho de los y las interinas a cobrar el verano tras el acuerdo alcanzado con CCOO, UGT y CSIF o la subida a 21 horas lectivas tras haberse comprometido a no hacerlo el curso pasado han dejado en evidencia a Dolores Serrat.

Y frente a todo este sinsentido de Dolores Serrat, un año de movilizaciones desconocido en los últimos años. Huelgas Generales como la del 14N, huelgas estatales contra la LOMCE como la del 9M, las 3 huelgas convocadas en mayo por CGT, Marea Verde y Plataforma por un Programa Bilingüe contra los recortes y la del 18 de junio que cerraba un curso combativo. Pero no solo huelgas, de nuevo volvieron los encierros, las caminatas, las manifestaciones, los escraches, las peticiones unánimes de dimisión a Dolores Serrat, las performances, las cadenas humanas, la bajada al Ebro, las peticiones en apoyo a los interinos de los claustros, las comparecencias en Cortes de sindicatos como CGT… Y una novedad, por 1ª vez en Aragón se ha iniciado una campaña en defensa de la Pública y contra los conciertos educativos, campaña llevada a cabo por CGT, STEA, Marea Verde, IU y MHUEL y consistente en denunciar la política de beneficios que tiene este Gobierno hacia la Red Concertada, y denuncias que no solo han consistido en manifestaciones sino también en recursos jurídicos. Aunque hay que lamentar que no todos estén en este campaña contra la Concertada, ya que hay sindicatos (UGT y CCOO) y partidos políticos (PSOE) que tienen muchos intereses económicos y políticos en juego.

Y la otra características de las movilizaciones ha sido la implicación de toda la Comunidad Educativa contra la LOMCE, desde las asambleas de padres-madres hasta las recogidas de firmas y los encierros han situado a Aragón como uno de los principales territorios en la lucha contra la Ley Wert.

Pero la mayoría política del PP-PAR ha actuado igual que la mayoría estatal del PP, haciendo oídos sordos a las exigencias unánimes de cambio y actuando con una soberbia y falta de respeto impropia de una Consejería que se llama de Educación.

Por todo ello, desde CGT calificamos estos dos años de gobierno de Dolores Serrat como los peores en la historia reciente de la educación aragonesa, pero con la esperanza de que toda la batería de recursos jurídicos que están presentando las distintas organizaciones sindicales y partidos políticos den marcha atrás a alguna de dichas medidas y con la vista puesta en un inicio de curso combativo, curso en el que dos deben ser los objetivos prioritarios, frenar la precarización laboral del colectivo interino y dar marcha atrás en alguno de los graves recortes que han sufrido estos dos años y potenciar y aumentar, a través del trabajo iniciado por los citados sindicatos, partidos y asociaciones, la presión contra las privatizaciones y concentraciones.

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[Enrike García Francés es Secretario General de FASE - CGT Aragón]

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